El alcalde de Cerceda, el socialista José García Liñares, se ausentó ayer del pleno ordinario que aprobó solicitar un préstamo de 2,6 millones a Abanca para ejecutar diversas obras. El Ejecutivo municipal apeló a la urgencia de estos trabajos, que disponen de ayudas europeas o que se financian con aportaciones de otras administraciones y que, defendió, "es necesario licitar a lo largo de este año".

El regidor se ausentó del pleno alegando una indisposición repentina, pero su explicación no convenció a los grupos de la oposición. PP y BNG expresaron al término de la sesión sus sospechas de que obedeció más bien a las advertencias realizadas por el secretario municipal, que emitió un informe en el que alertaba de las consecuencias que podría tener la participación de Liñares en la votación tras haber sido condenado a ocho años de inhabilitación por prevaricación.

En un informe redactado el pasado 24 de septiembre a petición de la oposición, el funcionario recordaba que el alcalde había sido condenado por un delito contra la Administración pública, por lo que, de acuerdo con la ley electoral, no puede permanecer en el cargo aunque la sentencia no sea firme. Por este motivo, advertía el habilitado nacional, su voto viciaría de nulidad cualquier acuerdo adoptado por el pleno, que podrían ser impugnado.

La sesión estuvo presidida por el socialista Juan Manuel Rodríguez y el préstamo de 2,6 millones salió adelante con los votos de PSOE y BNG y la abstención del PP. El voto de la oposición resultó crucial. Y es que la ausencia de Liñares hizo Gobierno local y oposición quedasen empatados (seis concejales del PSOE, cinco del PP y uno del BNG).

El BNG se mostró convencido de que la ausencia de Liñares, más que a una indisposición repentina, respondió al temor al posible voto en contra de los nacionalistas. Y es que tanto el Bloque como el PP calificaron de "esperpéntica" la convocatoria por parte del regidor de este pleno y recordaron que cualquier acuerdo que aprobase Liñares tras conocerse la condena judicial sería nulo de pleno derecho.

El nacionalista Alberto Sánchez defendió su voto a favor de la petición de este préstamo "por responsabilidad con el pueblo de Cerceda". El concejal apeló a la importancia de las obras y al riesgo de perder las ayudas europeas y de otras administraciones si no se aprobaba ya esta operación de crédito. Entre otros trabajos, la propuesta del Gobierno local incluye la construcción de varias sendas peatonales, el acondicionamiento de la zona verde del polígono, obras de mejora energética y la reforma de la Casa Consistorial o del local social de Xesteda.

El PP, que se abstuvo en este punto, se mostró menos convencido de la necesidad de este préstamo. Su portavoz, José Francisco Santos, cuestionó la urgencia de los trabajos. "No se trata de ninguna emergencia social, son solo obras", argumentó el edil, que durante la sesión solicitó al Ejecutivo municipal que aclarase sus dudas sobre algunas de las inversiones incluidas.