La próxima llegada de la alta velocidad ha llevado a Adif a sacar un contrato para modernizar y mejorar las actuales líneas ferroviarias en Galicia e instalar más y mejores sistemas de seguridad, con el fin de hacer "más competitivo" el transporte por tren para lograr el objetivo de aumenta el tráfico tanto de mercancías como de pasajeros. Por eso este organismo creó un plan director de toda la red ferroviaria gallega y entre las seis líneas en las que se prevé hacer mejoras están la de A Coruña-Betanzos y la de Santiago-A Coruña, dentro de la comarca coruñesa. Adif acaba de licitar por 3,9 millones de euros (IVA incluido) la redacción de todos los proyectos a realizar para mejorar el control y la señalización, asociados al plan director.

El primer objetivo que se marca Adif para ser más competitivo es potenciar el tráfico de mercancías para lo que establece la necesidad de "garantizar conexiones ferroviarias a principales nodos logísticos", y menciona los puertos y otros centros logísticos. De hecho subraya que los puertos son "imprescindibles para el mantenimiento y desarrollo de la actividad económica" de ciudades costeras.

Este objetivo primordial de Adif se contrapone a que la propia presidenta del organismo Isabel Pardo reconoció hace dos días que todavía no existe un convenio ni un compromiso firmado para la financiación de la conexión al puerto exterior de Punta Langosteira, que costaría unos 150 millones de euros.

Al mismo tiempo, el enlace por tren con esta dársena exterior cada vez parece más improbable después de que el propio Puertos del Estado reconociese el impacto mortal para el puerto que supone el cierre de Meirama anunciado para el próximo año, pues la Autoridad Portuaria contaba conque el carbón hacia Meirama sería la principal actividad del tráfico ferroviario.

El contrato licitado por Adif ahora es para conocer en qué líneas y tramos es necesario instalar sistemas y aparatos para mejorar la seguridad, entre ellas las líneas de A Coruña con Santiago y con Betanzos. Este operador ferroviario quiere tener estudios preliminares sobre la viabilidad técnica y económica de instalar estos sistemas en los distintos tramos. Sistemas como los de ayuda al mantenimiento, aparatos videográficos, bloqueos electrónicos, señales luminosas laterales y alfanuméricas; además de sistemas para la propia protección del tren como balizas de señales y frenado automático y el ERTMS de frenado (famoso desde el accidente de Angrois, del que se investiga si estaba desconectado).

Prevé estudiar también la instalación de sistemas auxiliares de detección ligadas a la seguridad como detectores de impacto en la vía o de caída de objetos, además de diversas telecomunicaciones.