El desbordamiento del instituto más nuevo de Culleredo, en enero de 2016, se ha consolidado en menos de cuatro años. Los tres colegios adscritos al Rego de Trabe suman en la actualidad 139 alumnos en sexto curso de Primaria, mientras que el centro de Secundaria ofrece 90 plazas en primer nivel de ESO y en el presente curso ya supera la ratio marcada en las tres. El instituto Blanco Amor, en el que la Xunta escolariza a los estudiantes que no caben en el Rego de Trabe, tiene seis aulas en primero y segundo de Secundaria, pese a ser un centro previsto para cinco.

La ratio de alumnos por aula que marca la norma es de 30 en Secundaria. El Rego de Trabe cuenta en el presente año escolar con tres aulas de 33 alumnos cada una, según los datos más recientes facilitados por el Ayuntamiento de Culleredo. En segundo curso, superan el límite dos aulas, con 33 y 32 estudiantes, mientras que la tercera tiene 29. También dos de las cuatro aulas de cuarto de ESO rebasan el límite, con 32 chicos en cada una.

A inicios de 2018, el centro llegó a abrir cuatro clases de primero y cuatro de segundo de ESO pese a que debía tener tres por curso. El cierre de esa cuarta aula al término de ese año escolar dejó fuera a varios estudiantes que procedían de los tres colegios adscritos a ese centro „Sofía Casanova, Isaac Díaz Pardo y Vila de Rutis„, que se derivaron al Blanco Amor. La Xunta rechaza realizar obras en el centro nuevo para dar cabida a más estudiantes y apuesta por matricularlos en el vecino, solución que no convence a la comunidad escolar local.

La reubicación de alumnos que no caben en el Rego de Trabe en el instituto próximo ha sido la política seguida por el Gobierno gallego estos años. El Blanco Amor, sin embargo, ya cuenta en primer y segundo curso de ESO con seis aulas en funcionamiento en cada uno, pese a que se preveía que contase con cinco por nivel. Suma 175 alumnos en los seis grupos de primero, de modo que la media de estudiantes por aula es de algo más de 29, al límite de la ratio fijada.

Familias de alumnos y el Ayuntamiento han advertido en varias ocasiones de que el incremento de la población escolar en niveles educativos inferiores conllevará una mayor saturación de las aulas en los próximos años. En este año escolar, cuatro de los cinco colegios públicos del municipio cullerdense superan la ratio máxima de 25 alumnos por aula en Primaria en algún nivel.

El Ría do Burgo es el más saturado, con aulas que exceden el máximo de niños previsto en cuatro cursos: en las dos aulas de segundo y de tercero de Primaria, en las tres de quinto y en una de sexto. El Díaz Pardo rebasa la ratio en las dos aulas de cuarto y en una de las dos de quinto curso. El Sofía Casanova excede los 25 niños por aula en los dos cursos de segundo de Primaria y el colegio de Tarrío, en dos de las tres clases de quinto.

La comunidad escolar ha reclamado en numerosas ocasiones a la Xunta que se elabore una planificación del mapa educativo con previsión suficiente. El Gobierno local prevé mantener una reunión con el Ejecutivo gallego antes de que acabe el año, como habían acordado ambas administraciones, para trasladarle la preocupación por la saturación que se prevé en primero de ESO el próximo curso y exigir medidas.