Alumnos de quinto y sexto del colegio O Mosteirón de Sada ejercieron ayer de concejales y aprovecharon su toma simbólica de las bancadas para solicitar al Gobierno local que retrase más allá del 8 de diciembre el encendido del alumbrado navideño para ahorrar energía y costes.
Los escolares defendieron que su propuesta no solo contribuirá a reducir la contaminación lumínica, sino que permitiría destinar el ahorro a fines que consideran más urgentes: obras y, especialmente, ayudas a las familias con menos recursos. "Todo es malo si te pasas de cantidad", resumió uno de los pequeños concejales por un día.
En el pleno, que coincide con la cumbre sobre el cambio climático, los escolares hicieron una vehemente defensa del alumbrado de bajo consumo, más económico y sostenible y reclamaron un "uso más eficiente y racional" de las farolas. El alcalde, Benito Portela, recogió el guante y anunció que el Ayuntamiento retrasará este año el encendido navideño. "Buscaremos la fecha más apropiada", añadió la concejala de Participación Cidadá, Rebeca Mouriño.
El pleno infantil, que duró más de una hora, debatió otras propuestas de mejora en materias educativas, deportivas y medioambientales. Los escolares pidieron al Gobierno local que habilite huertos urbanos para recuperar espacios, favorecer la relación entre vecinos y facilitar alimentos frescos de calidad. Demandaron también un espacio de ocio para jóvenes y más ayudas a los clubes deportivos del municipio. En concreto, los alumnos pidieron una mayor aportación para el Sada Patín y mejoras en la pista de patinaje que, advirtieron, "comienza a ser peligrosa". "El asfalto parece una lija y hay grietas", alertó una alumna.
Otra de las peticiones fue dirigida a mejorar la playa de Sada y a poner fecha al demandado plan de regeneración. El alcalde recordó al alumnado que se trata de una competencia de Costas y defendió la necesidad de analizar el impacto para evitar actuaciones lesivas a medio plazo.
