El nuevo colector que garantizará el suministro de agua al polígono de Morás, en el que se instalará un gran consumidor como Hijos de Rivera, tendrá un coste de 3,8 millones de euros, según recoge el proyecto. La Xunta, a través de Augas de Galicia, será la encargada de realizar los trabajos y el Concello asumirá íntegramente el coste de esta infraestructura, según confirmaron las dos Administraciones públicas. La conducción contará con una conexión a la red general en Vilarrodís y otra en Arteixo.
La previsión es que la obra esté finalizada en el año 2022. El proyecto de obra, que ya se encuentra redactado, establece un plazo de ejecución de doce meses. La longitud de la estructura será de unos 5 kilómetros aproximadamente.
El colector partirá de un depósito de agua que construirá la Empresa Municipal de Agua de A Coruña (Emalcsa) en la parte alta del polígono de Vío. Desde allí discurrirá hasta pasar por el lateral de la cantera de O Moucho, en Pastoriza, hasta llegar a un camino asfaltado que llega hasta la aldea de Vilarrodís. A continuación, seguirá por el lugar de A Ponte y pasará por debajo de la AC-551 (vial entre la A-6 y la rotonda de Sabón) hasta entrar en el polígono de Morás.
El colector contará con una conexión a la red municipal en Vilarrodís y otra en las proximidades de A Ponte (en este caso se unirá a otra canalización de abastecimiento que construye en la actualidad la Xunta) De este modo, la infraestructura podrá suministrar agua a Morás y a todo el municipio.
El pasado mayo, en el protocolo para la dar forma a la compra de casi la mitad del polígono firmado por la Xunta, el Concello e Hijos de Rivera, Arteixo se comprometía, como condición indispensable, a firmar en un plazo de seis meses un contrato de suministro de abastecimiento que incluyese la construcción de la infraestructura necesaria. El suministro de agua es fundamental para los procesos industriales que desarrollará la empresa coruñesa.
La conducción partirá de un depósito en Vío. Esta edificación será ejecutada por Emalcsa, que firmará un convenio con Arteixo. El acuerdo fija que la instalación, con un coste de 3,5 millones, la costeará la empresa pública coruñesa, ya que se encuentra situada dentro del municipio vecino. A cambio, Emalcsa repercutirá un canon por metro cúbico consumido. El plazo estimado máximo para la recuperación de la inversión es de 25 años, a contar desde 2023.
El alcalde, Carlos Calvelo, asegura que el Gobierno local no va "a repercutir" este canon "ni a los vecinos ni a las empresas", ya que "la previsión del servicio no sea deficitaria" con la implantación de nuevas empresas.
