La empresa redactora del Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM) de Culleredo realiza modificaciones en el proyecto en busca de un "equilibrio" entre sus propuestas, el objetivo del Ayuntamiento y los criterios de la secretaria y el arquitecto municipales, que informaron en contra del documento. Entre las modificaciones que incluirá el plan, se incluye la previsión de suelos urbanizables "por fases", explica el Concello.

El número de suelos urbanizables y de viviendas previstas centró una de las discrepancias que manifestaron los técnicos. La propuesta para solventar estas diferencias consiste en que puedan desarrollarse por fases, de modo que primero se obre en una parte y, más adelante, solo si hay demanda, se desarrolle todo.

La redactora realiza estos cambios en el PXOM después de realizar un estudio del proyecto, centrado en los aspectos técnicos y jurídicos, con el objetivo de lograr el visto bueno de los técnicos municipales sin renunciar a su planteamiento y a las directrices del Concello. El objetivo del Ayuntamiento es que el municipio pueda crecer hasta los 40.000 habitantes. En la actualidad tiene unos 30.500, señala el Gobierno local, por lo que proyecta que la población tenga posibilidad de aumentar hasta en casi un 24%.

El Ayuntamiento confía en que los cambios que introduce la redactora para buscar un acercamiento con los técnicos y, al tiempo, ajustarse a la legalidad, permitirá desbloquear la tramitación del proyecto, paralizado desde hace dos años. El Ejecutivo municipal asegura que "en breve" se celebrará una reunión entre todas las partes para intentar alcanzar un acuerdo y, de ser así, el plan podría llevarse a pleno para su aprobación provisional en el primer semestre del año.

El Ayuntamiento rechaza avanzar qué hará en caso de que los técnicos municipales mantengan su rechazo al proyecto urbanístico. Apunta que descartar la documentación supondría una demora de años hasta elaborar y tramitar uno nuevo y elude descartar que un tercero lo supervise y se pronuncie. La Xunta es la administración que tiene las competencias en la aprobación definitiva de los proyectos urbanísticos.

El Concello rechaza por ahora avanzar la previsión de nuevas viviendas que fijará en el plan, uno de los puntos que generaron mayores discrepancias. El pasado mes de junio, el Gobierno local aseguró que se rebajaría casi a la mitad, de 7.339 a unas 4.000, es decir, 3.000 menos. Y el equipo redactor ya había tenido que rebajar la previsión en un 4,7% con respecto al documento expuesto al público en 2013, que autorizaba de 7.763 viviendas nuevas.

La rebaja en la previsión de nueva vivienda responde a los cambios en las estimaciones de evolución demográfica. Frente a los cálculos iniciales que estimaban un incremento de unos 15.000 habitantes, los últimos datos apuntan a un máximo de 9.000.