El Concello de Betanzos elevará hoy a pleno la primera Relación de Puestos de Trabajo (RPT) de su historia. Este documento, fundamental para la organización del personal, se somete a debate dos años después de que el Ejecutivo municipal descubriese que la RPT que había aprobado hace diez años no tenía validez jurídica por diversas irregularidades en su tramitación y porque no había sido publicada íntegramente en el Boletín Oficial de la Provincia.

La Relación de Puestos llega a pleno con polémica y reparos no suspensivos de Intervención y Secretaría y críticas de la oposición por diversos motivos, entre otros, la exclusión de gran parte del personal laboral. La RPT solo recoge a 16 de los 84 empleados laborales, dado que solo incluye a los fijos a los que lograron la declaración de indefinidos por sentencia judicial.

El Gobierno local, del PSOE, defiende que exclusión de 68 de los trabajadores de la plantilla ha merecido es obligada por un cambio legislativo que solo permite reflejar los puestos laborales indefinidos y funcionarios, pero no a los laborales temporales en situación de fraude de ley, que deberán acudir a los juzgados si quieren que se declare su carácter indefinido y pasar a formar parte de la plantilla. El edil de Personal, Diego Fernández defiende que el principio que inspira la RPT es "consolidar el mayor número de puestos", hace un llamamiento a la "tranquilidad" y garantiza que los trabajadores que queden fuera de la RPT y que decidan no reclamar su indefinición por la vía judicial conservarán igualmente sus puestos y realizarán sus funciones al amparo del "convenio colectivo que fija la estructura retributiva".

Secretaría e Intervención cuestionan la exclusión de casi la mitad de la plantilla del Concello de la RPT. La secretaria recuerda que la RPT es un "instrumento donde se diseña la estructura ideal del Concello", insta al Ejecutivo a distinguir entre puesto y plaza y apunta al hecho de que no todos los trabajadores en fraude de ley que recurran a los juzgados y sean reconocidos como indefinidos tendrían que ser incorporados, dado que sus puestos podrían ser amortizados con la correspondiente indemnización. Un razonamiento del que se vale para solicitar "encarecidamente" que se incorporen a la RPT "todos los puestos de naturaleza estructural que realicen tareas ordinarias y necesarias".

Su advertencia va en la línea de la del interventor municipal. Un argumento que hace suyo también el BNG, que ha pedido la retirada de la Relación de Puestos de Trabajo. Su portavoz, Henrique del Río, denuncia que esta distinción entre laborales reconocidos y lleva aparejadas diferencias salariales y acusa al Ejecutivo de "cargar la responsabilidad" de las irregularidades en materia de personal a los trabajadores. El PP expresó también su "preocupación" por los trabajadores que quedan en un "limbo".

El sindicato mayoritario, CSIF, defendió ayer el documento y pidió el respaldo de todos los grupos. Recuerda que fue aprobada con su voto y el de CCOO en abril de 2019, un mes antes de que las elecciones sindicales le otorgasen también el apoyo mayoritario del personal laboral.

Este sindicato agradece el "talante dialogante" del Gobierno local y de la empresa encargada de elaborar la relación de puestos y pide a todos los partidos "que dejen su lado intereses particulares" y apoyen una RPT votada "por los sindicatos con más representatividad" y que expresa la "voluntad de todos los trabajadores".

La CIG no comparte su postura. Este sindicato avanza que presentará alegaciones contra la exclusión de "casi la totalidad del personal laboral" y denuncia que es una RPT "discriminatoria" que "castiga" al personal por la mala gestión del Gobierno local.