El Concello de Culleredo dictó este martes una instrucción para la regulación de su servicio de taxi, "ante el estado de alerta declarado para evitar la propagación del coronavirus Covid-19, al no existir una regulación específica desde la Administración autonómica", apunta. Ordena limitar el aforo en los vehículos a un 50% de su capacidad, ventilar con frecuencia, reforzar rutinas de desinfección y limpieza y evitar usar la calefacción o aire acondicionado e insta a facilitar a los usuarios geles desinfectantes.

Asegura que es "el primer ayuntamiento del área metropolitana que lo realiza", y admite que regula el servicio, sobre todo, en atención al "importante número de taxistas de Culleredo y que dan además servicio a un punto con tráfico de viajeros como el aeropuerto de Alvedro". El alcalde de Culleredo, José Ramón Rioboo, mantuvo contactos con representantes de la Asociación de Taxis de Culleredo, que le manifestaron su preocupación. En el texto, el Concello ordena limitar el aforo en los vehículos a un 50% de su capacidad máxima autorizada; renovar el aire abriendo las ventanillas de forma periódica y evitar emplear los medios de climatización; reforzar las rutinas de limpieza y desinfección, con especial atención a las zonas y elementos más comunes al tacto, como las manijas de las puertas o los cinturones de seguridad; y aumentar la frecuencia de la limpieza y desinfección de los vehículos. Además, recomienda poner a disposición de los usuarios toallitas o geles desinfectantes y usar el pago electrónico o aplicaciones.