La Dirección Xeral de Enerxía e Minas de la Xunta ha autorizado el cierre definitivo de la planta de cogeneración de Inditex en Sabón (Arteixo) y le otorga un plazo de seis meses para desmantelar las instalaciones. Esta actividad del emporio, de energías renovables, no generó muchos beneficios, sobre todo tras el recorte de las primas de que hizo el Estado.

La multinacional instaló hace casi 25 años esta planta, con tres motores de gasóleo y tres generadores eléctricos, y después realizó dos ampliaciones (en 1998 y 1999) con más motores, generadores y transformadores, y fue inscrita en el régimen especial de producción eléctrica. En 2002 cambió a motores de gas natural.

En 2015 Inditex cerró la primera fase de ampliación y en 2017 la segunda, hasta que en septiembre de 2019 pidió a la Xunta autorización para el cierre de toda la planta.