La Patrulla del Seprona de la Guardia Civil interceptó el pasado sábado a una familia al completo incumpliendo el estado de alarma decretado en marzo. Los agentes encontraron a cuatro de sus miembros en un descampado a 500 metros de su casa, mientras que el otro progenitor fue detectado caminando en dirección al lugar para reunirse con el resto del grupo.

En concreto, el cuerpo de seguridad descubrió en la planicie a un progenitor junto a su hija, con la que se encontraba paseando varios perros, así como a dos hijos, uno conduciendo una motocicleta y otro menor pilotando un Quad para el que no tenía edad suficiente. Tanto ellos como los padres fueron identificados por la Guardia Civil, que les comunicó que serían denunciados ante la Subdelegación del Gobierno por no respetar el estado de alarma provocado por el coronavirus. Tras las diligencias, la familia regresó a su domicilio, haciéndose cargo del Quad uno de los progenitores.