En tiempos de confinamiento forzoso, la música puede convertirse en el mejor aliado para viajar sin moverse del sofá y olvidarse, aunque solo sea por unos minutos, del Covid-19. Y las bandas de música de Sada y Sementeira de Cambre han logrado extraer todo el potencial a saxos, trompetas, flautas, oboes, fagots, clarinetes, trompas, trombones... para transportar por unos momentos a la ciudadanía a una pista de baile.

Los integrantes de las dos agrupaciones musicales han dedicado horas y horas de trabajo a tocar cada uno desde su casa y montar después dos clasicazos que alegren un poco el confinamiento al vecindario: I will survive, de Gloria Gaynor, y Mi gran noche, de Raphael.

Imposible mantener quietos los pies con la versión de la reina de la música disco que han tocado y montado veinte de los componentes de la banda municipal de Sada. Sus integrantes se han armado de arte y paciencia para realizar su primera actuación "virtual", con la que quieren rendir su particular homenaje a todos los trabajadores que plantan cara a diario a la pandemia.

El clásico del empoderamiento femenino de Gloria Gaynor se convierte en un himno a la supervivencia en tiempos del Covid-19 bajo la batuta de Miguel Brea, director de la banda municipal de Sada. "Es un tema que transmite alegría y esperanza, que levanta el ánimo", apunta este músico.

La agrupación, que cumplió recientemente 25 años, pretendía difundir la pieza mucho antes, pero dar con el programa adecuado y realizar el montaje llevó su tiempo. Los músicos se grabaron con sus móviles y Fran Rivera fue el encargado de realizar el montaje final en su tiempo libre. No solo los músicos de la banda dejaron su impronta en el tema, también sus familias prestaron sus voces para los coros.

Los integrantes de la banda Sementeira de Cambre han demostrado también con creces que no hacen falta grandes medios cuando sobran los ánimos y ganas de insuflar algo de alegría a los cambreses durante el confinamiento. . Cerca de cuarenta músicos voluntarios de la banda se grabaron con sus móviles para montar después una versión de Mi gran noche ideada "para bailar, cantar y, sobre todo, sonreír". como apuntan desde la agrupación que dirige Javier Vidal Suárez.

Todo un clásico para marcarse un baile durante esta cuarentena y cantar, a viva voz o para sus adentros, eso de que "qué pasara, qué misterio habrá...".