La clásica pegatina en los coches de la bandera gallega con la vaca sobreimpresa podrá ser sustituida en breve por la imagen de un aerogenerador porque van camino de ser más abundantes. En lo que va de 2020, la Consellería de Medio Ambiente ha publicado el inicio de la tramitación ambiental de un total de 19 parques eólicos en Galicia, diez de ellos en la provincia de A Coruña, y de ellos, tres en la comarca. En total serán 116 aerogeneradores con una potencia en total de 526 megavatios. Todos se han hecho públicos entre el 21 de febrero y esta misma semana, el pasado miércoles. Trece de ellos se han publicado en pleno confinamiento y la mayor parte de ellos, salvo alguno de 2018, han sido redactados el pasado mes de marzo.

De estos 19 parques, 12 están promovidos por la coruñesa Greenalia, el grupo por el que fichó el pasado 11 de febrero como directora de desarrollo corporativo la exconselleira de Ordenación do Territorio y Medio Ambiente y excandidata del PP en A Coruña, Beatriz Mato. Los otros siete restantes son proyectados por la madrileña Green Capital Power, del grupo Capital Energy que controla Martín Buezas y Asociados, familiar del presidente de ACS Florentino Pérez.

En los tres parques de la comarca coruñesa se ubicarán veinte de estos molinos de viento de nueva generación, que son muchísimo más potentes y más altos que los primeros, por lo que no se necesita instalar tanta cantidad. En el municipio de Vilasantar por ejemplo, el parque denominado Abrente (Capital Energy) , contará con ocho aerogeneradores que tendrán una altura de 132 metros.

En Aranga habrá otra instalación eólica con cuatro aerogeneradores, el parque Penas Boas (Greenalia), cerca de Montesalgueiro. El tercero, Carboeiro (Green Capital), coge los municipios de Arteixo, A Laracha y Culleredo, una zona de monte en su mayoría a eucalipto desde Loureda.

En el entorno más cercano al área coruñesa también están en tramitación otras cuatro infraestructuras de este tipo de energía: la de Cerqueixal con 6 aerogeneradoes entre Coristanco y Cabana de Bergantiños; el de Solpor con 7 molinos entre Ordes y Mesía; el de Alvite entre Negreira y Mazaricos con 12 aerogeneradores (es el más grande junto con otro en Ourense) y el de San Cosmeiro entre Mazaricos y Outes con 8 molinos.

Dentro de la provincia coruñesa también están en marcha dos instalaciones eólicas en A Baña y una en Val do Dubra, y otra entre Boiro y Porto do Son.

En Vila de Cruces (Pontevedra) se tramitan hasta tres parques (Rodeira, Cunca y Axóuxere). El resto se ubican en Antas de Ulla y Agolada, Paradela, Pastoriza, Castro de Rei, Cospeito, Monterroso y Portomarín en Lugo; Montederramo y Maceda en Ourense; y Rodeiro en Pontevedra.

Greenalia, que inició su actividad en 2006 y cotiza en el mercado alternativo desde diciembre de 2017, tiene negocio de venta de energía eléctrica, eólica, fotovoltaica y de biomasa, con divisiones en logística, forestal, industria, térmica y eléctrica. Su primer parque eólico, en Vimianzo (6 aerogeneradores), empezó a funcionar hace poco, en diciembre de 2019. En Curtis construyó la planta de biomasa más grande de Galicia, que empezó a vender energía ya el mes pasado, aunque se vio perjudicada por los efectos de la pandemia.