Traslados a segundas residencias y reorganizaciones de viviendas marcan la pauta en los residuos en el confinamiento. "Sabemos que hay gente que está pasando el confinamiento en municipios de los alrededores de A Coruña", apunta el gerente de Cespa, Manuel Docampo, quien cita, además del incremento en la basura de la comarca, que "los guardias de tráfico y policías habían registrado en una época más salidas que entradas a la ciudad". Destaca también el incremento en los depósitos no autorizados de enseres. "Mobiliario de casas, sofás, sillas, colchones, televisores... La típica reforma. Gente que está reformando o reacondicionando su segunda vivienda o su casa. Tienen más tiempo para tareas que habían dejado pendientes", asegura Docampo. "Estamos detectando, desgraciadamente, muchísimas deposiciones de enseres y voluminosos descontrolados en parajes de difícil acceso y en alrededores de contenedores. Todos los días tenemos que sacar camiones de refuerzo para las rutas", advierte el gerente. "Hubo un día en que recibimos diez avisos por teléfono y, cuando fuimos, había 60 o 70 zonas con residuos depositados en la ruta que no habían sido avisados por teléfono", explica Docampo, y asegura que antes del confinamiento, lo normal era registrar "la mitad" de estos vertidos incontrolados. En los alrededores de los puntos limpios, que permanecen cerrados, se acumulan también "ruedas, neumáticos, aparatos electrónicos o colchones", afirma el gerente de Cespa, que estudia reabrir estas instalaciones.