"Vemos muy bien esta medida porque aquí no andamos agrupados. Y conocemos bien los límites de nuestra parroquia", asegura el vecino y miembro de la asociación vecinal Os Sete Rueiros de San Julián de Almeiras Juan Varela que, con 69 años, estaba a límite del cambio de franja horaria que ahora ya no tiene que cumplir. Explica que el alcalde de Culleredo les avisó el jueves por la noche de que dejarían de estar sujetos a los límites de horarios. "Nos parece bien poder salir a la hora que queramos, a mí y a los vecinos, que pasan por delante de mi casa y hablan. Y nosotros andamos por dentro de la parroquia", garantiza. Asegura que mucha gente de la parroquia de O Burgo —más poblada y que seguirá sujeta a las franjas horarias— se desplaza en sus caminatas hacia Almeiras para evitar la concentración de gente en el paseo marítimo, decisión que ve comprensible. Él y sus conocidos y vecinos de la parroquia, sin embargo, apuestan por no salirse de Almeiras, asegura. "Yo no voy a O Burgo más que para comprar en la farmacia o en el supermercado", asegura.