Los usuarios de la playa de Caión, en A Laracha, temieron lo peor en la tarde del martes, cuando un niño que hacía surf era incapaz de salir del mar y un hombre que se encontraba allí acudió a su rescate. Durante varios minutos no se les pudo ver debido a la niebla y las personas que estaban en el arenal pensaron que había ocurrido una tragedia. Al final todo salió bien y lo sucedido se quedó en un susto. La fortuna quiso que la persona que acudió al rescate fuese el jefe del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas (GEAS) de la Guardia Civil, Celestino Gago, más conocido como Tino, que no dudó en ayudar. Tenía experiencia y el rescate entre duró 15 y 20 minutos porque había corrientes. “Tenía miedo de que nos golpeara una ola y el niño se fuera al fondo”, asegura al revivir lo ocurrido. Por suerte, fueron capaces de llegar sanos y salvos a la orilla.

Este agente del Instituto Armado, que es de Caión, se encontraba en playa de As Salseiras con su hijo de siete años durante su día libre. Estaban en la orilla cuando vio a un grupo de cuatro pequeños de unos diez o doce años de edad en el agua intentando tomar olas con sus tablas. Entonces, uno de ellos fue arrastrado por la corriente y no era capaz de ir hacia tierra. “No hacía pie. Intentó dos olas, pero la corriente lo llevaba hacia fuera. Nada, y decía que se cansaba y que no llegaba”, relata este guardia civil. Esto ocurrió no muy lejos de la orilla. En ese momento, Tino tuvo que dejar a su hijo solo en la playa y se lanzó al agua para intentar al niño.