Arteixo se ha convertido en la mayor preocupación de la Consellería de Sanidade en el área metropolitana de A Coruña al detectarse que el número de contagiados no para de crecer y que en entre el jueves y el viernes el incremento fue muy superior a los registrados en los últimos días. Por este motivo, ha decidido endurecer las restricciones que se aplican en este concello desde principios de este mes, cuando en el área se decretaron las primeras limitaciones para evitar el aumento de contagiados. Las reuniones privadas quedan limitadas hasta un máximo de cinco personas y los bares y cafeterías tienen prohibido servir en el interior de los locales, con lo que solo pueden usar las terrazas. En estos locales también se aplica el tope de cinco personas por mesa. En cambio, los restaurantes sí pueden tener clientes en el interior, aunque con la misma de gente por mesa, según comunicó el Ejecutivo autonómico.

Estas nuevas medidas ya están en vigor desde la pasada medianoche y serán revisadas en un plazo de cinco días. El conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuíña, fue el encargado de anunciar estas restricciones, que fueron publicadas en la noche de ayer en el Diario Oficial de Galicia (DOG) y que incluyen limitaciones de aforo para bodas: un 50% en espacios libres y un 25% en espacios cerrados. Estas limitaciones también se aplicarán a un barrio de Lugo, A Milagrosa. El objetivo es evitar que se produzcan concentraciones de gente en establecimientos hosteleros y en la vía pública.

La razón que adujo el Gobierno gallego al Concello de Arteixo para tomar esta medida fue el aumento de casos registrados. Ayer, en el momento de endurecer las medidas ya vigentes, la Xunta contabilizaba un total de 125 casos confirmados de coronavirus en Arteixo. El jueves eran 108, lo que supone que entre estos dos días se registraron 17 nuevos enfermos. El pasado miércoles había 104, según los datos facilitados por Sanidade a los concellos de la comarca coruñesa.

En la orden del DOG, la Xunta señala que el Concello de Arteixo presenta una situación "muy específica dentro de la comarca, con unas tasas de incidencia en los últimos tres días muy superiores a las del Concello de A Coruña, que era el más afectado hasta ahora". La Xunta teme que se esté "iniciando un rápido ascenso en la curva epidemiológica y por tanto deben ponerse en marcha de forma urgente medidas restrictivas" para "tratar de frenarlo"

La primera medida que adoptó el Gobierno local tras conocer el anuncio de la Xunta fue cancelar la feria que estaba prevista que se celebrase hoy en la plaza del Balneario y alrededores. Era la primera vez que iba a regresar después de dos semanas de suspensión para intentar combatir los contagios.

La Policía Local confirmó que reforzará las patrullas para vigilar que se cumplan las limitaciones impuestas por Sanidade. Este fin de semana estaba previsto que hubiese dos patrullas, con dos agentes cada una, para realizar las labores de inspección. Este servicio ya estaba reforzado respecto al habitual. El Concello explicó ayer que pretendía incrementarlo. Además, las áreas recreativas de O Seixedo y de Os Barreiros ya estaban cerradas desde hace días.

Dudas en la zona de aplicación

El alcalde de Arteixo, Carlos Calvelo, se mostró "de acuerdo con las medidas", pero mostró sus dudas de si es necesario que las restricciones se apliquen a todo el municipio. "En zona urbanas sí, pero en el rural no lo sé", afirmó. Explicó que es difícil delimitar los espacios al no haber datos de contagios por lugares.

El regidor apeló a la "responsabilidad de la gente" para intentar frenar los contagios de Covid-19 debido a que las fuerzas de seguridad y la Policía Local no pueden estar en todas partes. Reconoció que "las entidades locales" tienen "pocos recursos" para la vigilancia y pidió ayuda a la Policía Autonómica y a la Guardia Civil, aunque sabe que es difícil al ser verano y haber mucha gente de vacaciones. "Tenemos 95 kilómetros cuadrados y 138 núcleos de población", afirmó. El municipio cuenta con cinco grandes núcleos urbanos: Meicende, Pastoriza, Oseiro, Vilarrodís y Arteixo.

En declaraciones a Radio Coruña, al poco de conocerse la imposición de nuevas restricciones, el alcalde reclamó "ayuda" porque el Ayuntamiento tiene pocos efectivos para controlar estas nuevas restricciones que ha impuesto el Ejecutivo autonómico a las reuniones de gente en la vía pública y en los espacios de la hostería. "Tenemos todas las responsabilidades, pero no tenemos medios", afirmó.