La segunda jornada de vuelta al cole se saldó ayer con quejas por problemas de accesos en algunos centros; demandas de mejoras en el transporte escolar y un nuevo enfrentamiento entre concellos y Xunta en torno a las desinfecciones.

Los centros educativos han organizado distintas entradas y salidas de alumnos, con sus respectivos recorridos, para que no existan aglomeraciones. Pero estos casos están generando también algunos problemas. En el colegio Parga Pondal de Santa Cruz, en Oleiros, una salida es por la entrada principal, la rúa do Saber, pero otra es por el pabellón, polideportivo, lo que implica para los padres dar un importante rodeo.

"Si tienes un niño en Infantil y otro en Primaria, tienes que ir primero a una entrada y luego dar un rodeo grande para llegar a coger al otro", señalaba ayer una madre que tiene un pequeño de 6 años, y que proponía "adecentar la corredoira" que existe al final de la rúa do Saber, porque sería un "atajo" más corto.

En el Valle Inclán de Perillo incluso han publicado vídeos didácticos mostrando a las familias los cuatro recorridos habilitados según los cursos de Infantil y Primaria, y otro sobre cómo acceder al transporte escolar.

El Parga Pondal no ha sido el único en el que se han registrado quejas por los accesos. El Concello de Culleredo pidió ayer explicaciones a la Consellería de Educación por carencias en los accesos al colegio Isaac Díaz Pardo. Según informan desde el Gobierno local, el centro solo habilitó un acceso por una puerta peatonal pequeña, lo que "generó una acumulación muy grande de personas en el exterior". El Ejecutivo alerta del riesgo para la seguridad que se deriva de esta situación y denuncia que existe un portón grande y más accesos que no se han habilitado.

El Concello de Culleredo reclamó también a la Xunta la apertura de un expediente informativo por la supuesta difusión de "bulos" por parte de la dirección de este centro. Afirma que tuvo conocimiento por los progenitores y efectivos de seguridad de que el equipo directivo afirmó que el Concello no iba a reforzar la limpieza del centro, un dato que, afirma, es "absolutamente falso" y que está "generando alarma entre la comunidad escolar". El Ejecutivo reitera que aportará 60.000 euros más al año para labores de desinfección.

Alcaldes socialistas de la comarca, entre otros la de Betanzos, María Barral, reclamaron ayer a la Xunta que aporte fondos para limpieza y desinfección. Un informe jurídico de la Diputación concluye que le corresponde a la Xunta hacerse cargo de los costes, apuntan.

Otras quejas apuntan a carencias en el transporte compartido. La ANPA del colegio Virxe da Cela, que da servicio a escolares de Monfero e I rixoa, alerta del riesgo que se deriva de que el bus que realiza los transportes a dos o tres centros no realice las labores de desinfección entre un colegio y otro. La ANPA se ha ofrecido, incluso, a costear el desinfectante de tela. "Entre un colegio y otro no hay ningún tipo de desinfección, se rompe total y absolutamente el propósito de las aulas burbuja. Solo pedimos que echen un poco desinfectante de tela", apunta el presidente de la ANPA, Jorge Pena.

En Miño, las obras de mejora en el comedor han derivado en un conflicto entre el Concello y la Xunta tras denunciar el Ejecutivo que los trabajos ejecutados por la Consellería de Educación carecían de licencia y de proyecto. El Ejecutivo cargó ayer contra el PP, que había anunciado la actuación el pasado septiembre y de la que el Gobierno local no tenía conocimiento. El PP niega irregularidades y defiende la gestión de la Xunta.