El Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) ha confirmado que la Consellería de Educación debe declarar como personal laboral indefinido a una limpiadora a la que tenía contratada desde marzo de 2010 en el instituto Agra de Leborís de A Laracha.

La Xunta recurrió el fallo inicial del Juzgado de lo Social Número 1 de A Coruña pero tal como indica elTribunal, en el juicio la consellería no cuestionó los hechos probados, solo señaló que no erade aplicación un artículo del Estatuto Básico del Empleado Público en relación a la ejecución de la oferta de empleo público en un máximo de tres años.

Los magistrados señalan que no se trata de que se superase este plazo, "sino la existencia de un fraude que no se combate", un "fraude en el empleo de la figura contractual por la que se contrató a la trabajadora".

La limpiadora fue contratada por la Xunta en 2010 para sustituir a otra en situación de incapacidad temporal pero en mayo de 2011 suscribió otro contrato con ella porque la titular pasó a incapacidad permanente absoluta.

En el año 2013 se concertó de nuevo entre las dos partes un contrato que duraría mientras no se cubriese el puesto por la provisión legal, se reconvirtiese, suprimiese o amortizase y en el año 2019 la afectada formuló reclamación administrativa previa a la judicial, sin que la consellería le contestase de forma expresa, por lo que la mujer afectada recurrió al juzgado.

Obras en el Otero Pedraio

El Tribunal Superior también acaba de dictar otra sentencia que afecta a un centro educativo de A Laracha, en este caso el CEIP Otero Pedraio. El Concello larachés le impuso en 2016 una penalización y resolvió el contrato de obra que había concertado con ella para la obra de cubrición, cierre y gradas de la pista deportiva del centro, por retrasarse en su ejecución. El problema surgió por partidas ejecutadas sin recurrir a un modificativo del contrato.