El personal del colegio A Rabadeira, en Oleiros, convocará concentraciones todos los viernes para exigir refuerzos y "más seguridad en las aulas". La primera será hoy a las 14.00 horas. "Exigimos más personal, más recursos, disminución de las ratios y distancias de seguridad en todas las etapas educativas", apuntan en un comunicado suscrito por los docentes y trabajadores del servicio del centro.

En un comunicado, el personal de este centro educativo oleirense denuncia que carecen de espacios porque las aulas del colegio son demasiado pequeñas y las ratios muy elevadas, por lo que resulta imposible garantizar la distancia de metro y medio de seguridad. "Muchas profesoras y profesores tenemos nuestros horarios sobrecargados y clases atestadas de niños y niñas por no ser suficientes para cubrir la carga horaria del centro", denuncian.

Los trabajadores afirman que tampoco se pueden garantizar las distancias de seguridad en el comedor, lo que sumado a la falta de personal auxiliar, hace que no se puedan mantener los grupos burbuja aislados. "La solución para poder tener las dos tandas del comedor fue la supresión de la última sesión a los más pequeños, lo que da como resultado una desigualdad de horas lectivas entre los diferentes niveles de nuestro centro", alertan.

Comedores de Culleredo

El pleno de Culleredo aprobó ayer instar a la Xunta a adoptar medidas para mejorar la seguridad en los comedores escolares. Todos los grupos salvo el PP secundaron la propuesta, en que se reclamaban mejoras en los colegios Ría do Burgo, Sofía Casanova e Isaac Díaz Pardo. Los populares se opusieron y apuntaron que desde el Gobierno gallego les habían confirmado que el problema estaba solventado.

A pesar de que la Consellería de Educación trasladó de palabra al Gobierno local su compromiso de solventar los problemas que se registran en el centro Ría do Burgo por falta de personal, ni el Concello ni la comunidad educativa han recibido aún confirmación. La ANPA, que volvió a concentrarse ayer, mantiene la cacerolada de hoy. Desde la dirección explican que ya trasladaron a la Xunta el número de refuerzos necesarios pero matizan que deben ser aceptado por la concesionaria, extremo que todavía no se ha confirmado.