El Ayuntamiento de Oleiros tiene la renta más alta de Galicia, no paran de construirse lujosos chalés y pisos de medio millón de euros, pero a día de hoy aún existen calles en este municipio que carecen del servicio básico de saneamiento y tienen en sus jardines un pozo de negro que vacía periódicamente un tractor con cisterna. El Concello de Oleiros anunció la pasada semana que realizará asambleas vecinales para analizar si hay voluntad de cofinanciar la instalación de alcantarillado en cuatro zonas cofinanciar: As Covas y A Chave en Dorneda, As Pedreiras en la capital municipal y Benito Vicetto en Vilanova, en la parroquia de Nós. Ponerles este servicio a todos costaría, según el Gobierno local, 462.481 euros, y la intención es sufragarlos en copago,.

"Llevamos diez años pidiendo que nos pongan el alcantarillado, primero un señor no dejaba pasar, se habló de que pasase bajo la línea de alta tensión... a ver si ahora lo vemos aunque me parece muy caro, sale a 3.500 euros por casa, eso es una bestiada, una exageración", explica uno de los residentes en la calle Benito Vicetto (que prefiere no dar su nombre), donde son once viviendas a las que ponerle las tuberías de saneamiento hasta conectar con la red general municipal supondría una inversión de 78.000 euros, de los que el Concello pondría la mitad, es decir, 39.000 euros. El Ejecutivo local ha destacado que siempre ha ejecutado estas obras, a lo largo de los años, con aportación vecinal y solo se hará si todos están de acuerdo.

De esta forma, los vecinos de las once casas tendrían que costear entre todos los restantes 39.000 euros, lo que les saldría a 3.500 euros por familia. "Nos dijeron que sería entre las once casas pero yo creo que también tendrían que participar los talleres que están al final de la calle, muchos ya cerrados", destaca este residente.

Los vecinos de esta calle instalaron y costearon ellos la traída de agua, que les costó unos 1.500 euros, por lo que creen que el saneamiento "no podría costar más". Afirman que están de acuerdo en que se instale alcantarillado para terminar con los pozos negros que pueden producir "filtraciones" y "contaminar".

"Que te venga vaciar la cisterna te cuesta 140 euros. A la parrillada venían todos los viernes", señala un vecino de esta vía en Vilanova.

La calle Benito Vicetto es una de esas vías que se fue conformando a fuerza de la construcción de fines de semana, alpendres y luego naves, de forma desordenada, con ramales aún en tierra. Es una calle estrecha, sin acera ni arcén y con un asfaltado deficiente, por lo que los residentes recuerdan al Ayuntamiento que es necesario "al menos bachear, porque está todo lleno de buratos".