Pudo ser un lapsus o puede que la mente le jugase una mala pasada, pero hasta en dos ocasiones se refirió ayer el diputado del PP José Luis Ferro al parque enciclopédico de Betanzos como "O Pasamento", un desliz que no pasó desapercibido entre sus oponentes y que suscitó algún chascarrillo entre corrillos. El lapsus podría haberse quedado en eso, en un desliz sin más importancia, de no ser por la paradoja de que el debate derivase en un enfrentamiento a cuenta de la salud, o más bien los achaques, de este bien patrimonial. Y es que la afirmación del diputado popular de que O Pasatempo estaba "vivo" recibió una amarga respuesta desde las bancadas de sus oponentes. "Hablar de un parque vivo a día de hoy no es cierto, parte ya está irremediablemente perdido, es angustioso ver su decadencia e irrecuperabilidad", replicó la nacionalista Mercedes Queixas, que urgió a "no perder ni un minuto más": "No podemos ser nosotros los que firmemos su sentencia de muerte", incidió. El PP admitió el deterioro de este parque, del que ya solo se conserva una décima parte, y alabó la labor altruista de sus promotores, los hermanos García Naveira, pero apeló a la necesidad de elaborar previamente una "hoja de ruta para revertir su deterioro". "La Xunta demostró desde hace mucho su compromiso con la protección de este parque a través de muchas acciones, la más importante la declaración de BIC", afirmó José Luis Ferro.