La Guardia Civil de Oleiros, en el marco de la operación Superjan, detuvo a un coruñés de 72 años como presunto autor de un delito de robo con fuerza en vivienda, cuatro de hurto en casas habitadas y uno de estafa.

El presunto ladrón tras ser sorprendido en las viviendas esgrimía que se encontraba necesitado y que pedía limosna, según relata la Guardia Civil. “Ante cualquier descuido aprovechaba para hurtar joyas, y carteras, haciendo uso de tarjetas bancarias”, según afirma el Instituto Armado.

El detenido accedía al interior de las viviendas, incluso cuando sus moradores se encontraban en el interior, lo que produjo alarma social. El detenido fue puesto a disposición del juzgado.