Técnicos de la Consellería do Mar acudieron ayer por la mañana a inspeccionar los restos aparecidos en la playa de Bastiagueiro, tras la alerta del Partido Popular de que podrían ser residuos petroleros. Los expertos, a primera vista y tras comprobar que ni tenían olor ni producían irisaciones, consideran que se puede tratar de residuos orgánicos, naturales. Un hecho que lo apoyaría es que se pueden ver en algunas partes restos de madera.

Se tomaron muestras del agua de baño que irán al laboratorio de Medio Ambiente en A Coruña; y de estos residuos sólidos, que irán al laboratorio de combustibles de la Universidade de A Coruña en el campus de Ferrol. Los resultados de estos análisis confirmarán si efectivamente son turberas como se sospecha, restos naturales fosilizados, muy antiguos, que han aflorado ahora a causa de los temporales.

En la playa de Santa Cruz de hecho se descubrió en 2018 que unos restos de color negro entre las rocas y la arena, que al tocarlos estaban esponjosos, eran una turbera, llamado también bosque fósil, que se forma a lo largo de centenares de años por la acumulación de materia orgánica. No solo no son residuos contaminantes sino todo lo contrario, según los expertos ayudan en la lucha contra el cambio climático porque retienen metales pesados y controlan la erosión además de contribuir a la biodiversidad.

Tras el descubrimientos de estas manchas negras en la playa de Bastiagueiro, denunciada por el Partido Popular, el alcalde de Oleiros también apuntó ayer que podían ser restos del antiguo vertido del buque Prestige, chapapote, que no habían sido limpiados y que han aflorado ahora por las fuertes mareas.

Medidas

Ángel García Seoane también señaló otra hipótesis, que se tratase de un vertido del puerto de A Coruña, de algún buque petrolero. Según Seoane, cuando se hacen descargas de hidrocarburo siempre hay algún vertido y además “echan dispersantes”, que en gran parte se disuelven en el agua pero otros terminan en las playas del entorno. Incluso señaló que los petrolero es que entran en A Coruña no ponen medidas para evitar vertidos.

La compañía Repsol no obstante explicó que estos días no ha habido ninguna descarga de petróleo y en todo caso éstas se realizan con un sistema que garantiza que no se caiga al mar ningún elemento, al disponer de válvulas y drenaje.