Ante la solicitud del Concello de Culleredo de reforzar la línea de autobús de O Burgo tras detectar una “alta ocupación” en horas punta, la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade asegura que realizó un conteo del número de viajeros y concluyó que en “ninguna de las expediciones” examinadas “se superó la capacidad máxima autorizada”, que es de ocupación de todas las plazas sentada y una sexta parte de las de pie. Incluso afirma que la empresa concesionaria, Alsa, ya había dispuesto dos vehículos más de refuerzo para el servicio para evitar que algunos viajeros se pudiesen quedar “en tierra”.

El Ejecutivo autonómico afirma que se puso en contacto con la empresa que gestiona la línea y que “realizó un exhaustivo trabajo de revisión de todas las expediciones para comprobar si en alguna de ellas se había superado el aforo permitido”. En concreto, se analizaron al detalle los viajes entre el 13 y el 19 de enero. La conclusión, según traslada el departamento autonómico, es que “en ninguna de las expediciones” se superó “en ningún momento la capacidad máxima autorizada”. Por todo esto, la Xunta afirma que lamenta “que el Concello de Culleredo haya trasladado sin contrastarla una información que además de ser alarmista que no se corresponde con la realidad”.

La concesionaria, Alsa, informó al Gobierno gallego que “de las 458 expediciones que se realizaron entre San Pedro y A Coruña entre los días 13 y 19 de enero, en ninguna de ellas se superó en momento alguno la capacidad máxima autorizada en este período Covid por la Xunta” y que reforzará “la comunicación continua con nuestros conductores para que sigan prestando toda su atención a los aforos indicados para cada vehículo y mantendremos, incluso con mayor énfasis, el control para la disposición de más vehículos de refuerzo si fuesen necesarios”.

El alcalde de Culleredo, el socialista José Ramón Rioboo, apeló esta semana a la importancia de tomar medidas en el transporte público para contribuir a frenar la propagación del COVID. En la reunión telemática mantenida el pasado miércoles entre los regidores de ayuntamientos con nivel máximo de restricciones y los responsables de la Consellería de Sanidade, Rioboo pidió el refuerzo de la línea de bus entre San Pedro de Nós y A Coruña, que da servicio a Fonteculler y a O Burgo.

El regidor hizo esta solicitud al Gobierno gallego después de que varios usuarios del transporte le trasladasen su preocupación por la elevada ocupación de viajeros que tienen los buses de dicha línea en las horas punta. “Con el ánimo de ofrecer en estos momentos complicados un servicio más seguro, el alcalde de Culleredo propuso a la Xunta que aumenten al menos temporalmente las frecuencias o el número de vehículos”, apuntaron desde el Ejecutivo municipal cullerdense en un comunicado remitido a los medios de comunicación.

Nuevas concesiones tras más de medio siglo

Los autobuses interurbanos del área metropolitana de A Coruña vivieron a finales de diciembre un cambio importante con la renovación de las concesiones de los autobuses, que salieron a concurso público tras estar vigentes 60 años. En algunos casos han cambiado los nombres de las empresas que realizan el servicio, en otros las líneas han sufrido variaciones tanto en su recorrido como en sus horarios y también se han puesto en marcha rutas que no existían. Los usuarios se han encontrado de golpe con todas estas novedades. La zona este de A Coruña, que incluye Oleiros, Culleredo, Cambre, Sada y parte de Arteixo, la realiza Alsa a través de Cal Pita. La oeste la hace Arriva.