La empresa concesionaria del servicio de ayuda en el hogar de Betanzos, Sacyr Social, presentó al Concello en junio de 2020 una solicitud de reequilibrio económico, una compensación por las pérdidas entre marzo, abril y mayo, en el confinamiento, debido a la “reducción desproporcionada de usuarios” como consecuencia de la pandemia y la directriz del Ayuntamiento de que no podían reducir plantilla. La empresa ha cuantificado las pérdidas en estos tres meses del año pasado en 16.236 euros, porque dejó de prestar 944 horas al tener menos usuarios que se dieron de baja, y cobra por horas realizadas, mientras que sí abonó los salarios a sus trabajadores.
Siete meses después de esta petición de compensación económica, el Gobierno local llevará al pleno de hoy la propuesta de desestimar esta reclamación porque considera que el desequilibrio en el contrato debe ser de “un período más amplio, no solo en los tres meses en que se declaró el estado de alarma”.
El Ejecutivo señala que las bajas temporales de usuarios en una época concreta es algo que la empresa puede asumir “perfectamente” porque entra “dentro del concepto de riesgo y ventura”, pues se podría dar incluso “la situación contraria y tener más altas” que se prolongarán en el tiempo.
El Concello adjudicó el servicio de ayuda en el hogar a Sacyr en enero de 2020, el 14 de marzo se inició el confinamiento y en abril la empresa solicitó la suspensión parcial del contrato, que el Ejecutivo rechazó dos días después.
