Las lluvias registradas en los últimos días han traído al núcleo rural de Suevos una particular sorpresa. Se trata de una cascada que ha surgido en la travesía principal poco antes de llegar a la autovía de Langosteira (AC-15), en dirección al puerto. Aunque inicialmente pueda parecer llamativa, en realidad es una mezcla de aguas fecales y pluviales que proceden de un pozo de bombeo que no es capaz de absorber el caudal de la red. Los vecinos denuncian que llevan casi una semana con esta situación y el Concello responde que los desbordes que sufre la red en esta zona “serán solucionados por la obra” que ya ha iniciado la Xunta “con la nueva conexión del saneamiento” del polígono de Morás con la depuradora de Bens.
El agua baja con fuerza desde hace una semana aproximadamente y cae por un muro que da a la carretera, que es de la Diputación. Los residentes de la zona explican que el viernes a media mañana surgió esta peculiar corriente de agua. Procede de un pozo de bombeo en el que se juntan la red de pluviales y la de saneamiento. Cuando hay importantes precipitaciones la red de pluviales se desborda y arrastra también las fecales. Esta combinación de agua forma esta catarata. “El coche apesta”, afirma uno de los vecinos, que tiene que pasar con frecuencia por este punto de Suevos. Los residentes también alertan de la falta de salubridad de estas aguas, que obligan a la gente que vaya a pie a esquivar este punto.
El Gobierno local asegura, tras las quejas de los vecinos de Suevos, que este problema en la red se solucionará en los próximos meses con una obra que ya ejecuta la Xunta. “Los periódicos desbordes que sufre un pozo de saneamiento en Suevos en los días de fuertes lluvias serán solucionados por la obra que está ejecutando Xestur de la nueva conexión del saneamiento del polígono de Morás con la Edar de Bens”, afirma el Ejecutivo. Este nuevo colector de casi siete kilómetros de longitud reforzará también la capacidad de ese punto concreto de recogida de aguas en Suevos.
El contrato de la conexión exterior del saneamiento fue adjudicado a finales del año pasado a la empresa Copasa por un importe total de 5.115.000 euros y con un plazo de ejecución de 18 meses. Esta obra consistirá en la ejecución de las actuaciones para recoger y transportar las aguas residuales desde el polígono de Morás hasta la depuradora de Bens, en A Coruña.
Los trabajos que se desarrollarán serán la construcción de un sistema de colectores y elementos complementarios de saneamiento de forma que los caudales de aguas residuales generados en el polígono de Morás sean incorporados al actual sistema de saneamiento del núcleo de Arteixo. Esto supone la renovación y ampliación de la red de colectores a lo largo de 6,7 kilómetros. El plazo de ejecución de las obras es de 18 meses una vez sean adjudicadas.
