El Gobierno local de Arteixo ya ha definido el proyecto piloto para sustituir los actuales contadores de agua por unos de telelectura, lo que supondrá todo un cambio en el sistema para conocer los consumos de cada cliente, ya que no será necesario que ningún operario se desplace físicamente al lugar para obtener los datos. En total, el Concello comprará 152, que se instalarán en todas las empresas del polígono de Sabón. Los técnicos municipales ya trabajan en la elaboración de las bases del concurso público, que contará con un presupuesto de 152.000 euros.

Con el nuevo sistema, los datos de consumos serán obtenidos de una forma mucho más sencilla que de la forma actual. El proyecto sobre que el que se basa la licitación recoge que las “lecturas se centralizarán en un software de explotación que permita llevar un seguimiento de los caudales de los abonados y exportar dichas lecturas al programa de facturación del Concello”.

Este cambio de aparatos supondrá que ya no será necesario que un operario se desplace empresa por empresa para averiguar los consumos. “En la actualidad las industrias del polígono de Sabón disponen de contadores con totalizado, que deben ser leídos in-situ, con este sistema se dispone únicamente de una lectura cada tres meses, que se utiliza para la facturación de los consumos a los abonados”, indica el proyecto.

La instalación de los contadores debe estar finalizada, funcionando y entregada en cuatro meses desde la adjudicación por parte del Concello.

El Gobierno local eligió Sabón como zona de pruebas para conocer cómo funciona este sistema, pero más adelante prevé extender estos contadores a otros lugares. “La idea es que una vez iniciado en el polígono de Sabón la instalación de este tipo de contadores es ir extendiendo el modelo a otras zonas como puede ser el polígono de Morás”, señala el Ejecutivo municipal. Ahora deberá salir a concurso público la compra de este material. La gerente de la Asociación de Empresarios del Polígono de Sabón, Marta Marzoa, explicó que el Concello ya le había informada de esta actuación y señalo que desde la entidad están “contentos” por poder participar en esta “fase piloto” del proyecto.

El cambio de sistema permitirá “regularizar” contadores que en la actualidad son inaccesibles, como puede ser los de viviendas en los que no hay gente habitualmente o en las que los aparatos se encuentran un lugares de difícil acceso.

¿Cuál es la diferencia entre un contador tradicional frente a los digitales? La novedad radica en la transmisión del dato asociado al volumen registrado. Los actuales requieren que una persona debe leer el volumen registrado por el aparato y los que el Gobierno local instalará utilizan un detector y telelectura, lo que permite una recogida de datos a distancia, sin perder el tiempo en el desplazamiento hasta el lugar, como ocurre en la actualidad.