La Consellería de Cultura evitó ayer aclarar a este medio si estudiará la posibilidad de modificar el decreto por el que se declaró Bien de Interés el pazo de Meirás para incluir los bienes. Se trata de una medida que reclama el Concello de Sada, que aprobó ayer una moción en ese sentido, entidades memorialistas y BNG para intentar blindar los muebles y obras de arte de cara a una mudanza. Cultura apeló hace unos días a dudas sobre las competencias en esta materia al pasar provisionalmente el pazo a ser titularidad estatal, un extremo que según los especialistas consultados por este diario no afectaría a la tutela del BIC. Este diario preguntó a Cultura sobre esta cuestión sin obtener respuesta.

Los nietos del dictador ya han pedido retirar todos los bienes. En declaraciones al programa Espejo Público, Francis Franco reveló que lo más probable es que pongan a la venta la mayor parte del mobiliario y obras de arte Meirás. El nieto de Franco evitó dar detalles y no aclaró si entre los bienes que pretenden vender se encuentran las esculturas del Mestre Mateo o la biblioteca de Pardo Bazán, ambas BIC, o los muebles y obras de arte propiedad de la condesa de Pardo Bazán, que fueron vendidos con el pazo en 1938: “Imagino que la mayor parte [de los bienes] los tendremos que vender, si tampoco hay valor, se habla tanto de los tesoros”, apuntó.

Francis Franco avanzó que pedirán una indemnización por la retención de sus bienes desde el pasado diciembre —un derecho que les reconoce la Audiencia—, aunque evitó avanzar que cifra prevén solicitar. Al ser consultado sobre la cuantía, el nieto de Franco se limitó a expresar su pesar por el hecho de que el Estado rechazase su oferta de alquilar temporalmente los bienes muebles hasta que una sentencia firme dirima definitivamente la titularidad del pazo. “Ofrecimos un alquiler por unos cincuenta o sesenta mil euros al año. Estoy hablando de cifras ridículas al lado de lo que dicen que cuesta mantener el pazo y los costes judiciales de todo esto; pero ellos han tirado por la calle de en medio y nos lo han incautado”, criticó.

Los Franco han interpuesto una querella contra la Jefa de Conservación de la Dirección de las Colecciones Reales de Patrimonio Nacional, Pilar Benito, por el informe que elaboró sobre la titularidad de varios de los bienes muebles del pazo de Meirás, en los que apuntaba que varios muebles y piezas tenían claramente su origen en las Colecciones Reales Españolas y recomendaba realizar un examen en profundidad de todos los bienes, dado que era “muy posible” que hubiese más de propiedad estatal. “Es un informe de parte, nadie se lo pidió”, defendió Francis Franco, a pesar de que, según el acta de la comitiva judicial que inspeccionó los bienes, los abogados de los nietos del dictador no se opusieron expresamente a la presencia de esta técnica de Patrimonio Nacional, cuyo informe fue incorporado por la Xunta al inventario.

El Juzgado de Instrucción número 29 de Madrid ha abierto una investigación y citará a esta funcionaria el calidad de investigada. La querella de los Franco constituye un nuevo ataque a los inventarios de bienes elaborados por Xunta y Estado. Los nietos del dictador reclamaron hace unos meses su destrucción apelando a su derecho a la intimidad y han pedido ahora que se eliminen de las actuaciones y que las administraciones demandantes “se abstengan con carácter indefinido de todo uso, utilización, invocación, divulgación y o revelación.