La liquidación del presupuesto del pasado año, marcado por el inicio de la pandemia del COVID y por el confinamiento domiciliario, revela que la inversión en obras del Concello de Arteixo estuvo muy por debajo de lo previsto. Solo ejecutó un 33% de los fondos destinados a la puesta en marcha de nuevas actuaciones previstas en las cuentas municipales. Esta baja actividad por parte de la Administración local provocó que el remanente tesorería se elevase a cerca de 24 millones de euros, ya que buena parte del dinero para obras no se utilizó.

El Concello gastó 8,8 de los 26,5 millones de euros recogidos en el capítulo de inversiones reales, según recoge la liquidación. Esto supone que el Gobierno local ejecutó una tercera parte del presupuesto de obras que tenía previsto para el 2020. Se trata de una cifra similar a la de 2019, que registró un 29% de ejecución de los fondos de este capítulo, pero muy baja si se compara con la de otros ejercicios económicos anteriores. El dato fue de un 66,11% en 2018 y de un 66,63% en 2017, según los informes de los técnicos municipales.

El alcalde, Carlos Calvelo, reconocía en el último pleno municipal celebrado que la ejecución del presupuesto era baja de forma habitual debido a la escasez de medios personales para poder sacar adelante los numerosos proyectos que suelen aparecer en las inversiones de los presupuestos. “Uno de los problemas que tenemos en el Concello es el grado de ejecución de los presupuestos municipales, aseguró.

El presupuesto de 2020 ascendía a un total de 44,9 millones, aunque el Concello incorporó más adelante nuevos fondos hasta alcanzar los 66,5 millones. Las mayores inversiones que estaban programadas eran la construcción del campo de fútbol de Pastoriza, la compra de autobuses, la creación de carril bici y la ejecución de Meicende Concilia (una ludoteca y centro de día). De estas, solo la primera se realizó. El resto todavía siguen pendientes de ser ejecutadas.

El Gobierno local retira un crédito de las cuentas

El Gobierno local de Arteixo aprobó en el último pleno municipal eliminar una póliza de crédito de 4,6 millones de euros que figuraba en el presupuesto de este año y emplear en su lugar fondos propios para afrontar esos gastos. Entre las actuaciones que figuran incluidas en este apartado están la reforma del Balneario de Arteixo (1.000.000 euros), el plan de nuevos centros sociales de A Lagoa, Vilarrodís y A Cachada (650.000), plan de sendas municipales (500.000 euros), mejora de la intersección entre la travesía de Pastoriza y el paseo del Santuario (297.000), mejora de accesibilidad del instituto y la escuela infantil de Pastoriza (235.000).

La propuesta que aprobó el Ejecutivo local en la última sesión plenaria recogía que es intención de la Alcaldía “evitar el endeudamiento, sustituir la financiación ajena por recursos propios y sufragas las inversiones con remanente de tesorería para gastos generales”. El Gobierno local aprobó este año un presupuesto que asciende a un total de 50,7 millones de euros, 6 más en comparación con los del pasado año, cuando fueron de 44,9. La partida de inversiones asciende a 18,4 millones, cinco más que en 2020. Las mayores obras incluidas son la ejecución de la piscina de Meicende (2,4 millones), el colector de Vío al polígono de Morás (1,3), la ejecución de los fondos europeos dedicados al transporte público (1,2), la reforma del balneario (1) y la construcción del nuevo parque central en la capital municipal (1).