El Gobierno local de Betanzos llevó al pleno de ayer una propuesta para utilizar 1,8 millones del remanente total que le quedó del año pasado (en total 3,9 millones), al pago de facturas pendientes de proveedores y a obras. Hasta 210.696 euros son par apagar facturas pendientes de 2020 (sobre todo de luz) y otros 223.000 euros son para servicios hechos también el año pasado pero por los que las empresas no presentaron la factura hasta este año. El PP criticó que el Concello dijese hace poco que no había facturas pendientes del año pasado y en el pleno se vio que había 450.000 euros en facturas por este concepto. El Ejecutivo precisó que solo 210.896 son facturas en el cajón, la otra parte no, al ser las empresas las que demoraron la presentación.

Tras el pago de facturas, el Concello destinará 205.765 euros a completar la recuperación del convento de As Donas. Unos 351.000 euros son para varias fases del plan de sustitución de farolas por led y 35.000 euros para una obra en el casco histórico y en Pintor Seijo Rubio. Nuevos juegos en el Vales Villamarín, nueva hierba sintética en el campo de O Carregal, renovación de aseos públicos y la estructura de la Casa Gótica, son otras obras a realizar con este remanente.