Vecinos de la zona de Rialta en Oleiros y de zonas de Cambre como A Barcala y O Temple, denunciaron a principios de este mes de junio que llevaban varios días con el agua del grifo turbia. En A Coruña las denuncias fueron antes, a principios de mayo. El Concello cambrés apuntó que se debía a una incidencia normal al inicio del verano por el aumento de población y el llenado de piscinas. Sin embargo estas circunstancias se producen cada verano sin que se generalice durante días y en varios concellos un problema de turbidez. Bergondo y Sada también recabaron después quejas similares y los alcaldes de estos cuatro concellos mostraron ayer su “preocupación” al responsable de la empresa que se encarga de captar, tratar y distribuir el agua en la comarca, Emalcsa.

Fuentes de Emalcsa reiteraron ayer que las analíticas realizadas al agua de estos concellos arrojan resultados dentro de los parámetros, es decir, que son aptas para el consumo, aunque en el caso de un municipio se produjo un resultado más elevado en uno de los días con episodios de turbidez.

La falta de agua desde luego no es la causa, el embalse de Cecebre desde el que se suministra la comarca coruñesa está a más del 99% de su capacidad, un récord. El director general de Emalcsa, Jaime Castiñeiras, según el comunicado conjunto de los cuatro alcaldes, les informó de que se está trabajando en la elaboración de un estudio junto a la Universidade de A Coruña para dilucidar las causas de estas incidencias y poder subsanarlas.

La empresa admite así que desconoce el origen de esta turbidez persistente desde finales del pasado mes de mayo, y que por ahora solo parece afectar a estos cuatro concellos: Oleiros, Cambre, Bergondo y Sada, además de A Coruña inicialmente.

El pasado mayo la entidad apuntaba como posible origen la puesta en marcha del nuevo depósito de Almeiras. En Bergondo se ubican unos depósitos que distribuyen a varios de estos concellos. En el caso de Oleiros, su depósito principal está en A Edreira y a él entra el agua desde estos depósitos del polígono bergondés, por gravedad. En verano el aumento de demanda es asumido por las tomas de Ponte Pasaxe y Ponte de O Burgo.

Una peculiaridad de uno de los depósitos del polígono de Bergondo, construido en su día por la sociedad estatal Sepes, es que se encuentra en una situación irregular. Carece de titular, aunque lo construyó este organismo y Emalcsa se encarga de su gestión.

El alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane, aseguró ayer que la reunión con los responsables de Emalcsa fue “muy productiva”. García Seoane aseguró que el problema es general, afecta a varios concellos, y es necesario acometer nuevas infraestructuras, tanto el reclamado depósito en Sarro (San Pedro de Nós) como nuevas conducciones e incluso bombeos. “Una parte de estas obras la asumiría Emalcsa con los concellos y otra entendemos de debe ser la Xunta”, señaló el regidor.

Al final del encuentro, de hecho, alcaldes y Emalcsa acordaron solicitar una entrevista con la conselleira de Infraestructuras para solicitar la financiación para estas obras hidráulicas. Oleiros ya apuntó que la construcción del depósito de Sarro es urgente. Sería un depósito que distribuiría para Oleiros pero también para Bergondo y Cambre y del que también se beneficiaría Sada.

El Concello oleirense ya cedió a Emalcsa en 2017 los terrenos para ejecutar este depósito que tendría 1.500 metros cúbicos de capacidad y la empresa afirmó recientemente que ya tenía finalizado el proyecto de esta obra pero faltaba la financiación al ser una obra costosa.