La Corporación municipal de Abegondo aprobó ayer de forma inicial un nuevo Plan Xeral de Ordenación Municipal (PXOM), en un pleno extraordinario. El nuevo documento, que prevé la mitad de nuevas viviendas que las proyectadas en el plan anterior, anulado por el Tribunal Supremo en 2017, ha salido adelante con los votos a favor del Gobierno local, del PP y con mayoría absoluta, y con la abstención del único partido de la oposición, Alternativa por Abegondo (AxA).

El alcalde, José Antonio Santiso, insistió en animar a presentar alegaciones al nuevo documento a los vecinos o propietarios de suelos que se hayan quedado sin poder edificar o con clasificaciones con las que discrepen. El regidor confió en que el equipo redactor podrá modificar el documento para atender demandas vecinales, salvo “animaladas que no se puedan hacer”. “Si hay iniciativa, no hay problema ninguno”, afirmó el regidor.

El portavoz de AxA, Roberto Gómez, explicó que su grupo no votó en contra “porque después de 20 años a este concello le hace mucha falta un plan xeral” y tampoco a favor porque “el sur del concello queda desolado urbanísticamente”. Santiso justificó que “la iniciativa en los últimos años fue mucho más grande en la parte occidental, cerca de A Coruña” y avanzó su propuesta de impulsar, en la zona oriental, la plantación de frutales como cerezos o manzanos en esos suelos, con una financiación de apoyo autonómica o del Concello, y fomentar la creación de cooperativas o asociaciones. El alcalde aseguró que estas iniciativas permitirían, además, evitar actividades que podrían implicar el vertido de purines a aguas como las de la cuenca del encoro de Beche.

“Está bien que ofrezca frutales a cambio de parcelas urbanizables”, replicó Gómez, quien aseguró que ya había propuesto una iniciativa semejante en una reunión vecinal y uno de los asistentes le advirtió: “¡Por ahí vas mal!”. Santiso admitió, como había advertido Gómez, que jóvenes abegondeses se ha marchado a vivir y comprar inmuebles en concellos vecinos como Carral por la falta de un plan urbanístico que les permitiera construir en terrenos de su municipio.

Santiso reiteró su invitación a presentar reclamaciones al nuevo plan y mostró su convicción de que se podrá llegar a “un acuerdo” para ajustar el proyecto urbanístico a buena parte de las demandas vecinales. Durante el breve debate plenario, el alcalde recordó que el municipio contaba con unas normas subsidiarias de 1996 que “quedaron anuladas” y que “se intentó un plan xeral en 2013” que tumbó primero el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia y después, de forma definitiva, el Supremo. “Siento lo ocurrido”, manifestó el regidor, quien agradeció “la colaboración” y el sentido del voto de la oposición.

El nuevo plan prevé 1.398 nuevas viviendas, en lugar de las 2.622 que proyectaba el PXOM anterior, entre cuyas causas de anulación destacaba, precisamente, una previsión de vivienda excesiva e injustificada. Además, prevé solo dos núcleos urbanos en el concello: San Marco y San Tirso.