Más de 350 vecinos de Paderne han presentado alegaciones contra el parque eólico Pena do Corvo que promueve Iberdrola, un proyecto que ha provocado una fuerte contestación en otros municipios afectados, como Monfero, y que ha sido informado desfavorablemente por la Xunta. En las alegaciones que han presentado ante el Ministerio de Transición Ecológica, los residentes en Paderne, un municipio rural de unos 2.300 habitantes, advierten del impacto del tendido de alta tensión que proyecta la empresa que, alertan, discurrirá en algunos tramos muy cerca de las viviendas: “Esto va en contra de la lógica, es el mundo al revés. Existe un problema de despoblación en el rural, pero ¿quién querría vivir al lado de una línea de alta tensión o de un macro molino?”, se preguntaba ayer uno de los residentes afectados.

Empresas del sector primario como Orballo, Seitura, Bodegas Beade o Queixos Cagiao expresaron ayer su “oposición total” al proyecto y advierten de que la instalación de este macroeólico y las infraestructuras asociadas afectará de forma directa al resultado de sus explotaciones. Los empresarios inciden en que durante los últimos años se han puesto en marcha en Paderne diversos proyectos de emprendimiento en el sector primario que se podrían ver afectados por la puesta en marcha de este proyecto eólico. Recalcan que no se oponen a las energías renovables, pero sí a macroeólicos que constituyen “lo opuesto a lo que se debería fomentar para crear un rural más sostenible”.

Las alegaciones de los vecinos y emprendedores de Paderne trascienden un día después de que la Reserva de Bisofera Mariñas Coruñesas Terras do Mandeo hiciese públicas las que ha presentado contra este proyecto por su impacto en el paisaje, en hábitats prioritarios, ecosistemas de interés y en las explotaciones ganaderas y agrícolas. La entidad apela también en sus alegaciones a los efectos negativos de los tendidos eléctricos proyectados y advierte de la escasa distancia que separa algunos de los aerogeneradores y líneas aéreas de las viviendas.

La asociación ecologista Adega emitió también ayer un comunicado en el que denuncia el impacto “brutal” de este parque eólico en las Fragas do Eume y en hábitats prioritarios de la Reserva de Biosfera.