El espectáculo de malabares ofrecido por Kote Malabar en el atrio de la iglesia de Santa María dio ayer comienzo a la inusual edición de la Feria Medieval de Betanzos, que debido a las restricciones impuestas por la pandemia no cuenta este año con puestos en la calle ni con actividades multitudinarias. Todas las iniciativas programadas se caracterizan por estar destinadas a pequeños grupos de espectadores, como el espectáculo de magia del Mago González ayer en la plaza de la Constitución, donde también actuaron Acibreira y el grupo Azougue.
Para hoy está programada una nueva representación del Mago González a las 12.00 horas en Santa María, tras lo que habrá de nuevo juegos malabares, un pasacalles de Os Brincadeiros. Por la tarde intervendrá el grupo teatro La Recua.
El Gobierno local de Betanzos había anunciado inicialmente la suspensión de la Feria Medieval por “responsabilidad” , ya que consideraba que la situación sanitaria no era “propicia” para su desarrollo en las condiciones habituales, en las que miles de personas llenan las calles de la ciudad. La semana pasada se presentó finalmente el programa de una feria con un formato sustancialmente diferente, en el que las actividades se llevan a cabo espaciadas en el tiempo y en zonas don se mantiene la distancia social y se controlan los aforos.
