A solo un día del término del plazo fijado por la concesionaria de ayuda hogar para dejar de prestar el servicio, el Concello de Sada y la empresa han alcanzado un acuerdo para garantizar esta prestación esencial hasta que se adjudique un nuevo contrato.

El Gobierno local ha accedido a elevar el precio por hora de los 13,50 euros por hora que establecía el pliego de condiciones a los 15,90 euros que fija en el nuevo contrato, tras aprobar su licitación en el último pleno. Esta mejora en las condiciones queda supeditada a la debida justificación por parte de la adjudicataria, matizan desde el Ejecutivo.

La actual concesionaria, que había dado un ultimátum al Concello y advertido que sin una mejora en las condiciones económicas dejaría de prestar hoy, sábado 31 de julio, este servicio de atención a mayores y dependientes, ha aceptado la subida planteada por el Gobierno local, según confirmó ayer a este diario un portavoz de la compañía, Idade de Ouro Servizos Socionanitarios.

El acuerdo llega sobre la campana y tras meses de desacuerdos entre la empresa y el Concello, como desveló en la última sesión plenaria el Ejecutivo municipal, que expresó su preocupación por la situación y que afirmó que el ultimátum de la concesionaria, que rechazó en enero una prórroga de la concesión, le había cogido “de improviso”. La edil de Benestar, Isabel Reimúndez, apeló ayer a las dificultades jurídicas de aprobar una subida fuera del contrato y explicó que la reclamación de la empresa les llevó a estudiar diversas alternativas, incluida la remunicipalización del servicio o la firma de un contrato puente hasta la nueva adjudicación. Son dos opciones que, apuntó Reimúndez, “no se descartan”.

Los desacuerdos entre la concesionaria y el Concello mantuvieron hasta ayer en vilo a los trabajadores y usuarios de este servicio, que atiende a 170 mayores o dependientes y con 44 empleados en plantilla.

La oposición echó en cara en el último pleno al Gobierno local su falta de previsión. El PP se mostró especialmente duro y denunció ayer en un comunicado que el contrató venció el 19 de febrero y que la empresa registró el 22 de enero su renuncia y lamentaron la demora en elevar a pleno la licitación del servicio. “Llega al menos ocho meses tarde”, critican los populares.