La pequeña Nami alegra ya con su baile la calle Amil de Cambre. El mural de esta niña de proporciones mastodónticas con el que Slim Safont quiso evocar la “diversión dentro de casa” durante el confinamiento es una de las tres obras que se incorporan este año a la galería al aire libre del municipio. El Cromático Mural Fest finaliza su cuarta edición con un derroche de color, talento y creatividad.

El mural de Slim Safont de una niña bailando en la calle Amil. | // LA OPINIÓN A. P.

A la pequeña gigante de la calle Amil, se suman las obras del pontés afincado en Barcelona Edgar Goás, Wedo, y el argentino Franco Fasoli, Jaz. Tres reconocidos artistas que han dejado ahora su huella en el municipio cambrés, que puso en marcha en 2017 un festival con el doble objetivo de reivindicar el arte urbano y sacar los colores a las traseras de los edificios, de combatir el feísmo con litros de pintura.

El mural de Slim Safont de una niña bailandLa obra de Edgar Goás, ‘Woas’, en la urbanización A Barcala. | // LA OPINIÓN

El pabellón polideportivo Sofía Toro luce ahora una colorida fachada con un toque inquietante: un grupo de animales conversa alrededor de una hoguera, ajenos a la presencia amenazante de un lobo que acecha en las sombras. Este mural con un toque gótico de Franco Fasoli contrasta con el de Wedo, que quiso plasmar en una fachada de la calle Miño, en la urbanización A Barcala, “la sensualidad femenina, la delicadeza y el amor por la tierra” a través del retrato de una mujer rodeada de coloristas motivos naturales.

Como colofón del Cromático Mural Fest, el Concello ha promovido por primera vez la elaboración de un mural colaborativo que permita a los participantes en la masterclass impartida por Viviana Luccisano y Tope Rodríguez poner en práctica sus conocimientos. La actividad se realizó en el edificio Lumiera y estuvo abierta a la participación de todos los vecinos del municipio. El festival de arte urbano da sus últimas pinceladas, aunque queda todavía pendiente una de las obras, la del estadounidense Rub8cón que tuvo que aplazar su participación tras dar positivo en COVID-19.

A lo largo de los últimos años, han pasado por el Cromático Mural Fest reconocidos artistas, como Yoseba MP, que destapó los poderes de Luisa, la superabuela cambresa de la calle Balado con una fuerza sobrehumana que le permite cargar una bombona de butano con un solo brazo y hacer equilibrios sobre otra sin perder la sonrisa.

Al mural de este artista, con un don especial para detectar los poderes ocultos de esas superheroínas de mandil a cuadros, capaces de ocultar la fealdad de una medianera con su mera presencia, hay que sumar la colorista obra de la argentino Animalitoland de O Temple, o el Sekone, que inauguraron este festival en 2017.

En la calle Castellana llama la atención el mural del gaditano Manolo Mesa, que recrea a un grupo de amigos en torno a una queimada. Los vivos colores de la obra de la coruñesa Iria Fafián, también obligan a volver la mirada en la calle Polígono. Los amantes del arte urbano no pueden perderse tampoco la del barcelonés GR170, que inunda de color la pista polideportiva descubierta de A Barcala.

El Concello ha elaborado un mapa para que los visitantes no se pierdan en esta galería de arte urbano al aire libre que cuenta ya con 16 obras incluye también la obra de Novenoel, Sokram, el colectivo Alegría del Prado, Mister Thoms, Zësar Bahamonte, Nim9.