O Vello Almacén, el local de hostelería de Miño que desde 2016 está cerrado frente a la playa de A Ribeira, tiene la oportunidad de reabrir. El Ayuntamiento aprobó ayer el procedimiento de licitación para contratar la concesión para explotar el establecimiento, cuyo canon anual será de 4.000 euros.
El local, al que se accede por una pasarela peatonal tanto desde un extremo de la playa como desde la carretera de Cobo, tiene 98 metros cuadrados de superficie en su interior. El Concello, a través de una nota, detalla que 19,35 metros cuadrados corresponden a la barra; 60,30 son de zona pública; 12,30, de aseos; 6,15, de cocina y 21,62, de almacén. Dentro hay 38 plazas, de las que 20 son en mesa baja, ocho en mesa alta y diez en barra. La terraza dispone de una superficie de 120 metros cuadrados con una capacidad de 80 plazas.
La concesión prevista por el Concello será por cuatro años más dos prorrogables. El adjudicatario tendrá la obligación de instalar una pérgola en la terraza y de continuar con la explotación de la cervecería una vez finalizado el plazo de concesión, en caso de encontrarse en tramitación una nueva adjudicación y mientras esta no sea eficaz. Otro de los requisitos es que la gestión se lleve a cabo por profesionales especializados en el ámbito de la hostelería.
El alcalde de Miño, Manuel Vázquez Faraldo, destaca que la recuperación de este local “en un momento como el actual” supone el ofrecimiento de posibilidades de empleo a los vecinos, lo que considera “fundamental” . “O Vello Almacén siempre tuvo mucha clientela que subía de la playa a comer o simplemente a tomar algo mientras disfrutaba del paisaje. El local no podía estar más tiempo cerrado y nosotros, incluso cuando no gobernábamos, siempre insistimos en que el proceso de adjudicación se realizase a través de un concurso abierto”, explica Faraldo.
Fuentes municipales añaden que el Ejecutivo tuvo que legalizar algunos aspectos en la instalación para poder recuperar su uso y sacarla a concurso, como por ejemplo dar de alta la electricidad con un nuevo proyecto de ingeniería y reformar algunas partes del local para dar cumplimiento a la normativa industrial, por lo que ahora ya cuenta con la autorización de Organismos de Control Autorizados (OCA), de la que antes carecía.
El Gobierno local, por otra parte, aprobó ayer un suplemento de crédito de 53.346 euros para hacer frente con fondos propios al pago a tres propietarios del justiprecio de varias fincas que habían declarado sendas sentencias judiciales.
