El Concello de Sada ha elevado un 44% el presupuesto base de licitación del servicio de ayuda en el hogar en el nuevo pliego tras anular el anterior concurso el Tribunal Administrativo de Contratación Pública da Comunidade Autónoma de Galicia, que aceptó un recurso de la Asociación de Pequeñas Empresas Gallegas contra el estudio económico. El presupuesto base pasa de 1.886.607 a 2.729.622 euros y el valor estimado del contrato (que incluiría los dos años y otros dos de prórroga) pasa de 4,3 a 6,2 millones. El coste anual estimado inicialmente era de 907.023 frente a los 1.312.318 euros que recoge el nuevo pliego.

A consulta de este diario, el alcalde, Benito Portela, explicó que el incremento es el resultado de aumentar el precio por hora y las horas totales del servicio . La memoria prevé ahora 76.906 horas anuales a 17,06 euros más IVA, explica el regidor.

El nuevo pliego recalará hoy en pleno para su debate y aprobación. El precio por hora es considerablemente superior al que estipulaba el anterior (13,50) y al pactado recientemente con la concesionaria, Idade de Ouro Servizos Socionanitarios, para que prosiga con el servicio hasta la nueva adjudicación (15,90).

El Ayuntamiento de Sada sopesó la posibilidad de prestar directamente el servicio, que atiende actualmente a 170 mayores o dependientes, aunque finalmente ha optado por sacar de nuevo a concesión la prestación por dos años. El pliego establece que la nueva empresa tendrá que subrogar a las 44 empleadas.

El pleno debatirá también la aprobación del proyecto de rehabilitación de la piscina municipal, que permanece cerrada desde enero. Como informó ayer este diario, el proyecto asciende a 589.000 euros y se financiará a través de un convenio con el Instituto Galego de Vivenda e Solo (IGVS) que otorgara un préstamo de casi medio millón de euros a Sada a devolver a ocho años.

El PP de Sada agradece a la Xunta la concesión del préstamo para rehabilitar esta piscina, pero lamenta la demora del Ejecutivo en atender las quejas de los usuarios de esta instalación que, recalca, presentaron ya un escrito en el que alertaban de deficiencias en enero de 2020. Los populares denuncian que la piscina lleva ya diez meses cerrada y que todavía desconocen el alcance de las obras necesarias y desvelan que vecinos han acudido al Valedor ante la falta de respuesta.