Las excavadoras entraron en febrero de 2021 en los terrenos situados entre el embalse de Meicende y la gasolinera para iniciar la construcción de la nueva piscina que dará servicio a toda la zona norte de Arteixo. Un año después, los trabajos ya están ejecutados al 70%, aunque van retrasados respecto a lo previsto (debían haber finalizado a finales del pasado año) debido a la aparición de rocas que no figuraban en el estudio geotécnico y a la falta de materiales derivada de la rotura de stock en la cadena de suministros. La previsión del Concello es que la obra esté completamente lista en mayo y que la apertura de la instalación se produzca en septiembre, ya que antes es necesario contratar a una empresa la gestión del recinto.

El edificio, que cuenta con tres plantas, toma forma poco a poco. En el exterior se puede apreciar el revestimiento de corcho que envuelve las paredes y en el interior se pueden distinguir claramente las dos piscinas (una grande y otra pequeña) con las que contará el recinto. Este último espacio, que se encuentra en la primera planta, cuenta con grandes ventanales con vistas al embalse. En el segundo piso, por donde estará la entrada principal, habrá un gimnasio, tres salas de actividades, tres vestuarios y un pequeño espacio con vistas a la zona de las láminas de agua. En este caso, los trabajos están menos avanzados que en la zona de las piscinas. En el sótano se ubican las tripas del complejo, con tuberías, bombas y depósitos de agua.

Vista de los vasos de la piscina de Meicende. | // VÍCTOR ECHAVE

El complejo deportivo se ubica junto al embalse, un área recreativa y un paseo fluvial que está en construcción en la actualidad, lo que forma una pequeña zona verde en las proximidades del núcleo de Meicende y del área industrial de Agrela. Además, se da la peculiaridad de que el edificio está en una ladera. El arquitecto que elaboró la propuesta técnica, Jorge Nimo (del estudio Nimo-Mezquita), señala que la “clave del proyecto es la integración” con el entorno. “Está súper volcado a lo verde”, asegura.

La calle que permitirá el acceso al recinto de la piscina, que empezará en la travesía principal, discurrirá en paralelo al muro de contención de la gasolinera y terminará en una rotonda en la que los vehículos podrán dar la vuelta. El Gobierno municipal prevé la construcción de 39 plazas de aparcamiento a lo largo de este vial. Dos estarán reservadas para personas con movilidad reducida y otras dos para autobuses.

Construcciones López Cao ejecuta la construcción de la piscina por 4.169.000 euros, frente a los 5 millones aproximados del precio que fijó el Concello como presupuesto máximo en la licitación.

El alcalde, Carlos Calvelo, destaca que con el nuevo complejo deportiva “se pega un salto de calidad” en la zona norte, en la que se cubrirá la demanda. También señala que los precios de los abonos serán los mismos que los de la piscina de Arteixo.

“Licitación conjunta” para las dos piscinas

El Gobierno local anunció poco después de empezar la construcción de la piscina de Meicende que la gestión del complejo se realizará mediante un contrato de prestación de servicios y no mediante una concesión, como es habitual en este tipo de casos, en los que se encomienda la gestión de un servicio de la Administración. En este caso se ha decantado por un contrato de servicios, el cual se adjudicará para desarrollar una actividad concreta. Los usuarios deberán abonar las cuotas al Concello y no a una concesionaria.

El motivo por el que el Gobierno local optará por este sistema es que se pretende realizar una “licitación conjunta” con la piscina de Arteixo, cuya concesión terminará en abril de 2025. Los estudios del Concello fijan que son necesarios 1.000 abonados pagadores para que la instalación sea sostenible económicamente.