Las calles del polígono de Morás, en Arteixo, hace ya más de tres años que están urbanizadas, con su asfalto, aceras, farolas, rotondas y señales de tráfico. Incluso ya hay placas que sirven para identificar los nombres de cada vial. En uno de ellos se puede leer la inscripción de “Rúa Cova do Ouro”, que hace referencia a un topónimo de un lugar que desapareció con la construcción del parque empresarial. Se da la casualidad de que esta vía da acceso a los terrenos en los que se asentará la nueva fábrica de Hijos de Rivera, matriz de Estrella Galicia, el gran tesoro que esconde este parque empresarial. Son cerca de medio millón metros cuadrados que podrán ser recepcionados por la empresa una vez la Xunta, promotora de esta área industrial, acabe con los últimos flecos de las obras de urbanización. En ese momento el proyecto de la factoría podrá ponerse en marcha.

El Gobierno gallego inició en febrero de 2021 los trabajos para acondicionar los terrenos correspondientes a la segunda fase del polígono, en la que 466.000 de los 498.000 metros cuadrados de su superficie, el 93,4% del total, fueron adquiridos por la empresa coruñesa. Un año después, esta actuación ya se encuentra en su recta final, lo que permite atisbar cómo quedará configurado el enorme solar. En realidad, hay cuatro plataformas diferenciadas dentro de estos terrenos (dos de gran superficie y otras dos más pequeñas), en las que hay una cantidad considerable de palas y excavadoras que se afanan en acometer los últimos retoques para completar la explanación. Durante estos meses se han realizado numerosas voladuras, lo que ha provocado quejas por parte de los vecinos de la zona.

Una calle y un trozo del solar de Hijos de Rivera. | // LA OPINIÓN Iván Aguiar

La adjudicataria de las obras es UTE Arteixo (compuesta por las empresas Civisglobal, Extraco y Canteras Cuadrados), que tiene hasta el 18 de marzo para acabar la actuación. La previsión inicial de la Xunta era que los trabajos estuviesen finalizados este mes, pero las firmas que asumen la ejecución de la urbanización remitieron al Ejecutivo autonómico el pasado 20 de enero un escrito en el que informaban de que no serían capaces de finalizar las obras a tiempo por causas ajenas a las propias empresas y solicitaron una ampliación hasta el 18 de marzo, “comprometiéndose a realizar los trabajos pendientes si se amplía el plazo inicial de ejecución”. El Gobierno gallego aceptó la petición.

Sobre el proyecto, el consejero delegado de Hijos de Rivera, Ignacio Rivera, avanzó hace un año que, en una primera fase, la factoría de Morás contará con una inversión de 150 millones de euros y posteriormente “se irá ampliando”. “Podremos montar la fábrica a partir de marzo o abril y el sueño es que esté produciendo a finales de 2023”, aseguró. Antes de que los trabajos para levantar el recinto puedan comenzar, la firma debe solicitar la licencia de obra. Por el momento no lo ha hecho, según confirmó esta misma semana el Concello.

Una de las cuatro plataformas que la Xunta ha preparado para la nueva fábrica de Hijos de Rivera en el polígono de Morás, en Arteixo. | // LA OPINIÓN Iván Aguiar

Una vez se complete el desarrollo de las cuatro fases en las que la matriz de Estrella Galicia ha dividido su proyecto de Arteixo, la capacidad máxima de producción que tendrá será de mil millones de litros al año. La fábrica de Agrela, en A Coruña, la única en la que la firma cervecera produce en la actualidad, tiene un techo de producción cercano a los 500 millones de litros al año.

La primera parte del proyecto incluye la construcción de una zona de recepción de materia prima, silos de almacenamiento de malta y maíz, edificio de limpieza, planta de molienda, taller de cocimiento, edificio de lúpulo, diversos tanques de almacenamiento, nave de envasado, almacenes, estación de tratamiento de aguas, sala de máquinas, planta generadora de frío y almacenes. La capacidad de producción de esta planta será de 250 millones de litros al año.

Hijos de Rivera firmó un convenio con el Concello de Arteixo y la Xunta en el que se comprometió a “mantener su actividad en funcionamiento en el polígono industrial de Morás” por un plazo mínimo de 30 años desde la puesta en marcha de sus instalaciones. El motivo de que se firmase este acuerdo es que el Concello financiará la construcción de una canalización de agua desde Vío.

La compra se cerró por 22,2 millones

La Xunta adjudicó en el año 2019 a Hijos de Rivera casi la mitad de la superficie disponible en el polígono de Morás por un precio de venta total de 22,2 millones de euros. Esta operación, según indicó el Gobierno gallego tras hacerla pública, serviría para “la construcción y puesta en marcha de una fábrica de cervezas de última generación”. También indicó que esta era “la mayor adjudicación de suelo empresarial realizada a una empresa por la Xunta en su historia”. En el momento de dar luz verde a la venta del suelo se autorizó la declaración de la propuesta como proyecto sectorial singular, lo que permitió la adjudicación directa de los terrenos.