El equipo de Voluntariado de Corporación Hijos de Rivera desarrolló ayer una actividad destinada a la reforestación de especies autóctonas en una parcela de la comunidad de montes de San Antón en Irixoa. El objetivo de la jornada fue preservar el ecosistema forestal gallego y su riqueza ecológica a través de la plantación de 200 árboles y arbustos. Esta iniciativa de recuperación ambiental se realizó de la mano del Grupo Naturalista Habitat, que coordinó la metodología de trabajo y la selección de las especies más idóneas para la zona. También contó con la ayuda de un grupo de 15 usuarios de la Fundación Adcor.