La reforma de la calle de Santa María, en pleno casco histórico de Betanzos y en las proximidades de las iglesias de Azogue y San Francisco, se demorará más de lo previsto. El Gobierno local explicó que los trámites para contratar a la empresa que se encargue de los trabajos se han retrasado de forma importante tras renunciar a la adjudicación las dos compañías que habían obtenido la mejor puntuación en el concurso público. De este modo, ahora el Concello ha procedido a encomendar la realización de los trabajos a una tercera firma, que ofertó la ejecución de esta actuación por 150.790 euros.

El Ejecutivo municipal explica que estas complicaciones durante el proceso de licitación derivarán “en un retraso de prácticamente dos meses para iniciar las obras”, en la que se preveía la renovación de la vía con la instalación de un pavimento con losas de cantería sin desniveles, de tal modo que quedase acorde a otros viales cercanos. Las bases que fijó el Concello para la ejecución de este proyecto establecen que el plazo de los trabajos es de tres meses y medio una vez se formalice el contrato con la empresa adjudicataria.

El Ayuntamiento marcó en 151.256 euros el presupuesto máximo para esta actuación cuando inició la licitación a principios de este año. El Ejecutivo local señala que la empresa que logró la mejor puntuación en el concurso público, con una oferta de 147.036 euros, rechazó la adjudicación. Lo mismo ocurrió cuando se le encomendó la actuación a la firma que quedó en segundo lugar, que había propuesto ejecutar las obras por 149.668 euros. Ante esta situación, la Junta de Gobierno Local betanceira aprobó contratar a la tercera empresa del concurso por un importe total de 150.790 euros. En cuanto a las otras dos que no aceptaron acometer los trabajos, el Concello atribuye la renuncia a “los problemas de suministro” y a “no poder mantener” las ofertas por la inflación. Además, indica que “abrirá expedientes sancionadores” a estas dos compañías “por no mantener sus ofertas”.

Las obras incluyen la sustitución de los servicios de abastecimiento, recogida de residuales y de pluviales con la finalidad de renovar unas canalizaciones obsoletas y solventar los problemas existentes en estas redes, la mejora del alumbrado público, la futura eliminación de los cruces aéreos de electricidad y telefonía y la sustitución del actual pavimento de chapacuña y piedra por uno compuesto de losas de granito en toda la calle.