Ángel García Seoane lleva casi cuarenta años como alcalde de Oleiros, que en los últimos años es el municipio más rico de Galicia y entre los 25 de España, además de ser el décimo de los concellos gallegos con mayor población y uno de los pocos casos de partido independiente en el poder desde hace décadas. Pero al alcalde de Vigo desde hace quince años, Abel Caballero, ni le suena el nombre. “No tengo ni idea de quién es este señor”, declaró ayer en la ciudad olívica, en una rueda de prensa sobre las fiestas en la que fue preguntado por las críticas que le dirigió Seoane por su baile de break dance en el festival de O Marisquiño.

Seoane calificó de “ridículo” su baile, además de “esperpéntico” y lo comparó con un mono o un “chimpancé” por los movimientos que realizó. El regidor oleirense ya le había criticado en otras ocasiones, sobre todo por su afán de protagonismo y su gasto energético en las luces de Navidad. Caballero, con este comentario demostró que el mayor desprecio es no hacer aprecio.