El alcalde de Oleiros, Ángel García Seoane, confirmó ayer que existe una “entente” con el Gobierno local de A Coruña para analizar la posibilidad de poner en marcha un servicio de transporte marítimo entre las dos ciudades, una propuesta que encajaría totalmente con las actuales políticas de la Unión Europea de fomentar una movilidad más sostenible, un transporte colectivo que retire vehículos de la carretera.
“Hay una entente para poner un transporte a Santa Cristina o a Mera, sacaríamos muchos coches de la carretera, estoy totalmente de acuerdo”, declaró García Seoane, que confirmó que habló de esta posibilidad con A Coruña “hace unos días”, tal y como indicó el Ejecutivo local a este periódico el pasado sábado. El Concello oleirense ya ha incluido esta posibilidad en su Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS), planteando unas embarcaciones “modernas y rápidas” con frecuencias adaptadas a horarios de mayor tránsito y ampliadas en verano.
Los dos ayuntamientos podrían poner en marcha este servicio sin necesidad de una concesión de la Xunta porque el tráfico marítimo entre puntos continentales (no entre islas) está liberalizado tras una disposición de la Unión Europea que permite la libre prestación de servicios de transporte marítimo de personas en aguas interiores de Galicia. La competencia del Gobierno gallego ahora se limita al procedimiento de inscripción en un registro de operadores (basta con una declaración responsable).
El mayor problema para hacer realidad este servicio marítimo es la falta de instalaciones adecuadas en Oleiros, que requeriría unos pantalanes o puntos de atraque. Los pósitos de Mera y Santa Cruz son autonómicos aún (el Ejecutivo oleirense lleva años reclamando la transferencia de los dos), tienen más de cien años y nunca han tenido una rehabilitación integral, sin hablar del calado. En el caso de Santa Cristina ya no queda nada del embarcadero . Existe el dique que prolongó Costas en 2019 para evitar la pérdida de arena y un pequeño atraque frente a A Fábrica para el club de remo.
El puerto de A Coruña es estatal y los de Oleiros autonómicos por lo que una línea de transporte marítimo precisaría autorización para el atraque en los muelles. Las operadoras de este servicio por barco podrían ser públicas o privadas. Incluso podría ser realizada por una entidad supramunicipal de los concellos partícipes en la iniciativa.
En los años cincuenta y sesenta había colas siempre para coger las lanchas en la Dársena o en As Xubias para ir a los arenales oleirenses. Muchos cogían el tranvía Siboney hasta As Xubias y allí “la lancha de O Rubio” a Santa Cristina. Eso sí era movilidad sostenible.
Incluso en los años treinta existió durante un tiempo el vapor Adriano que partía del puerto coruñés y bordeaba la costa hasta Santa Cristina. Hace unos años la familia Fernández, en el negocio desde 1928, reinició la ruta marítima por la ría con el Rías Altas Dos, que sigue a día de hoy pero solo como atractivo turístico y en verano, y de nuevo se ven siempre colas de personas.
La Xunta planteó en 2010 una ruta por mar A Coruña-Oleiros-Sada
El Concello coruñés en agosto de 2004, hace casi veinte años, con Francisco Vázquez de alcalde, anunció que estudiaban la viabilidad de impulsar a medio plazo una ruta marítima, recuperando un sistema que funcionó durante décadas, con los puertos de Mera y Santa Cruz. A Coruña incluso se mostró dispuesta a subvencionar a la empresa concesionaria del servicio. Planteaban Mera como el puerto de atraque más viable.
También Xunta veía con buenos ojos esta iniciativa: en 2010 el entonces presidente de Portos de Galicia, José Manuel Álvarez-Campana, planteó poner en marcha “el próximo año”, o sea, en 2011, una ruta marítima enlazando los muelles de A Coruña, Santa Cruz, Mera pero también Sada. El Concello sadense entonces también dio luz verde a la idea, que también apoyaron entidades empresariales. Nunca se hizo nada. La Xunta, en las Directrices de Ordenación del Territorio (DOT), apuesta por la consolidación de las líneas de transporte de viajeros por vía marítima, articuladas “adecuadamente” con otros transportes colectivos en los puertos, que serían “nodos intermodales”.
