El Consello de la Xunta ha autorizado la colaboración técnico-financiera de la Consellería de Infraestruturas e Mobilidade, a través de Augas de Galicia, con el Concello de Sada para adecuar la capacidad de tratamiento de la depuradora a las necesidades actuales del sistema de saneamiento en base a la normativa vigente. Las actuaciones previstas tienen como finalidad dotar a la instalación hidráulica de capacidad para tratar los volúmenes de agua almacenados en la red, minimizar los problemas actuales de vertido cuando llueve y, en un el escenario futuro, todas las aguas generadas en tiempo seco. El Gobierno gallego señala que iniciará el concurso público para contratar el proyecto “en las próximas semanas para iniciarlas en el segundo semestre de 2023”. El presupuesto de esta inversión asciende a 10,3 millones de euros.
La mejora de la estación de tratamiento de aguas residuales es una obra largamente demandada por el Concello. Hace unos días se hizo público que las cuentas diseñadas por la Xunta para 2023 reservaban para esta actuación una partida de dos millones para 2023. A mediados de 2021, Augas de Galicia ya había comunicado al Ejecutivo local que asumiría la mejora del recinto, pero no ha sido hasta casi año y medio después cuando se ha formalizado.
El Ejecutivo autonómico asume íntegramente el coste de la obra, tanto la contratación como la realización de los trabajos, así como su dirección y gestión hasta completar su finalización. Por su parte, Sada se encarga de la puesta a disposición y gestión de los terrenos necesarios, la obligación de conseguir las autorizaciones para la puesta en marcha de las obras y su mantenimiento y conservación.
La actuación se ejecutará en dos fases y cuenta con un plazo estimado total de 33 meses. El cronograma del contrato establece el plazo de tres meses para la redacción del proyecto constructivo, diez meses para la primera fase de los trabajos, once para su puesta en marcha y ejecución de la segunda fase, y finalmente nueve meses para la puesta en funcionamiento de la segunda fase. La Xunta señala que el tratamiento de las aguas residuales estará garantizado en todas las etapas previstas en esta obra.
Mediante esta intervención, el Gobierno autonómico indica que la depuradora quedará dimensionada para atender las necesidades de una población de 24.393 habitantes en año horizonte 2044 y 6.070 equivalentes en aportación industrial. “La depuradora se dimensiona para poder tratar una contaminación equivalente a más de 30.000 personas para hacer frente a las necesidades de población fija y estacional que reciba y de la industria”, asegura la Xunta.
El PP sadense, emitió este jueves, tras conocer la noticia, un comunicado en el que celebra esta inversión.
