Sin fecha para restablecer el servicio de agua en Betanzos tras una semana de restricciones

Hoy se cumple una semana de restricciones en el consumo de agua de Betanzos por el brote de gastroenteritis y, de momento, las administraciones evitan fijar una fecha para restablecer este servicio. La alerta saltó el domingo 28 de mayo y la Xunta restringió dos días después el consumo por precaución y al filo de la medianoche del viernes 2 de junio declaró el agua de la traída no apta para el consumo tras constatar la presencia de norovirus. Desde entonces, no ha hecho ninguna nueva comunicación oficial.

Fuentes sanitarias consultadas sostienen que los casos de gastroenteritis han remitido, pero la Consellería de Sanidade no aporta datos oficiales y el Concello evita fijar fechas de momento para restablecer el suministro. No lo hará, subraya, hasta disponer de “todas las garantías”.

La empresa concesionaria del abastecimiento, Viaqua, ha puesto en marcha un “plan exhaustivo de limpieza y desinfección de la red” después de que las analíticas de la Xunta constatasen la presencia de este virus en el agua. Todo apunta a que el norovirus llegó a la red por un vertido de aguas residuales en las proximidades de la captación, aunque de momento tampoco ha trascendido la apertura de ningún expediente sancionador por parte de Augas de Galicia.

Son numerosas las incógnitas por despejar de un incidente que ha trastocado las rutinas básicas de la población de Betanzos, obligada a suministrarse a través de las cisternas instaladas en tres puntos del municipio. Son cada vez más las voce s que, en la calle o a través de las redes sociales, reclaman explicaciones sobre los motivos por los que no se detectó antes este virus, cómo llegó a la red y qué medidas pondrán en marcha las administraciones implicadas para que no se repita un episodio de este tipo.

La empresa concesionaria recalca que las analíticas realizadas a lo largo de la semana, y que d que cumplían todos los criterios sanitarios exigidos por el Real Decreto 3/2023, de 10 de enero, por el que se establecen los criterios técnicos – sanitarios de la calidad del agua de consumo, su control y suministro.

A la vista de lo sucedido, el Concello de Betanzos ha solicitado un informe a la concesionaria y, en base a las conclusiones, “tomará las medidas oportunas”. Los grupos de la oposición también exigen explicaciones y medidas para compensar a la ciudadanía y los negocios.

El PP exige al Concello que aclare cuándo tuvo conocimiento de este brote de gastroenteritis y denuncia, en base a testimonios de vecinos, que el agua presentaba mal olor el viernes 26 y un fuerte olor a cloro un día después. El BNG atribuye lo sucedido al “mal funcionamiento de un servicio municipal básico” , pone bajo la lupa el actual modelo de concesión y apuesta por una gestión directa.

La alcaldesa en funciones, la socialista María Barral, ha convocado hoy a los medios a una rueda de prensa para informar sobre la situación actual del servicio.