La senda peatonal y ciclista de Naval a Canide requerirá expropiar 66 fincas y tres viviendas

El Ayuntamiento de Oleiros acaba de aprobar por decreto, de forma inicial, el proyecto básico y constructivo para ejecutar una senda peatonal y ciclista de seis metros de ancho entre Naval en Santa Cruz y Canide en Mera, los 2,5 kilómetros que faltan para que todo el litoral sea accesible, después de que el Gobierno central esté a punto de finalizar el recinto de confinamiento de lodos en la ría, para poder unir el paseo de Beiramar con el municipio de Cambre, el otro trecho pendiente.

Este nuevo itinerario peatonal comenzará en la playa de Naval, donde la orografía es escarpada (con cotas de terreno entre diez y veinticinco metros) por lo que se construirá una pasarela de madera de pino (de tres metros de ancho) con escaleras hasta llegar a la rúa Tarreos. En este tramo no es posible que sea accesible para ciclistas, así que éstos tendrán que iniciar el recorrido en el núcleo de Santa Cruz, donde ya existe un carril bici, y llegar a Tarreos pasando por la rúa do Mar.

La ruta no invadirá el dominio público marítimo-terrestre, pues se dejará un espacio de seis metros respecto a éste excepto en el tramo de la playa de Naval por su relieve. La senda seguirá bordeando la costa hasta llegar a Canide y de ahí conectará con la rúa As Capillas. El proyecto propone además acondicionar un sendero existente cerca de un mirador hasta el lavadero que se encuentra en la bajada a la playa de Canide, disponiendo un firme de grava y cemento.

El Ayuntamiento de Oleiros viene haciendo a lo largo de los años actuaciones para conseguir que la costa sea accesible para que de manera peatonal, o en bicicleta, se pueda recorrer por paseos y rutas de senderismo.

La senda tendrá tres metros de ancho para peatones y otros tres para las bicis. Se optó por dividir en dos partes esta calzada para reducir el impacto visual, y en algunos tramos se ajardinará la separación. El firme será de pavimento ecológico y drenante, principalmente grava y cemento, y para los peatones se dispondrá hormigón desactivado.

Los trabajos consistirán en limpiar, desbrozar todos los terrenos, hacer desmontes, movimientos de tierra y terraplenes, luego demoler los pavimentos existentes y a continuación perfilar las cunetas en las márgenes, realizar los drenajes y poner tuberías de PVC para las pluviales.

Se instalará una barandilla de madera en todo el trazado en el lado del mar y en otros tramos, además de instalar mobiliario urbano. bancos, papeleras y mesas de madera, además de aparcabicis y carteles informativos. También se colocarán farolas de 4,5 metros de altura con luz LED (para lo que se harán canalizaciones).

Para ejecutar estos casi tres kilómetros de senda peatonal y ciclista se atravesarán en su gran mayoría parcelas privadas. Algunas ya fueron cedidas en su día al Concello (en la zona de Naval) y otras serán expropiadas. El Concello ya tiene lista la relación de propiedades afectadas y el cálculo de la indemnización, usando el método de capitalización de rentas para valorar los terrenos.

Son en total 66 las parcelas afectadas con una superficie total de 34.639 metros cuadrados. Las fincas verán ocupadas superficies entre poco más de veinte metros cuadrados hasta algo más de dos mil.

Expropian una pista de pádel

Este proyecto también afectará a tres construcciones, tipo fin de semana, de solo planta baja, construidas muy cerca del mar. En el proyecto se apunta a las dudas sobre la legalidad de estas edificaciones en este suelo, y se remite a su determinación cuando se efectúe la valoración concreta. También se expropiará una pista de pádel propiedad de una de estas tres viviendas afectadas y será necesario tirar algunos cierres.

El importe total de las expropiaciones está valorado en 205.188 euros, sin incluir el posible valor de las tres viviendas. El resto de terrenos afectados por el proyecto son municipales aunque aún así es necesario solicitar la autorización de Costas para realizar las obras debido a que se harán en zona de servidumbre de protección.

Esta actuación se ha proyectado con criterio de integración paisajística máxima por lo que se utilizará el terreno existente posible, reduciendo aportes externos de material y alejándose de zonas con riesgo de corrimientos (como sucede en varias zonas de la costa). El último tramo de senda peatonal costera fue inaugurado en 2017, entonces un itinerario de cuatro kilómetros entre Canide y Santa Ana, en la playa de Mera.

En el presupuesto de 2023 del Ayuntamiento de Oleiros figuran 150.000 euros para las expropiaciones de esta senda entre Naval y Canide. En el presupuesto aprobado para 2024 figura en el listado de inversiones esta senda litoral pero sin incluir la consignación presupuestaria, aunque sí se indica que se prevén gastar 300.000 euros en pagos por expropiación de terrenos (sin concretar”.

Suscríbete para seguir leyendo