Adif rechaza la petición de Curtis y mantiene el vallado de la estación

El Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif) descarta dar marcha atrás en el polémico vallado de la estación de Teixeiro y evita pronunciarse sobre la demanda de un paso elevado que demandan vecinos y el Concello de Curtis para «mantener unido el pueblo de Teixeiro».

En respuesta a las preguntas del BNG, el organismo estatal se reafirma en que el vallado de la estación era preciso por «seguridad operacional» y «para corregir situaciones potencialmente peligrosas» y deja en manos de la Xunta de Galicia las posibles mejoras en el paso subterráneo construido en 2013 que, denuncia el Concello, registra frecuentes inundaciones e incumple la normativa de seguridad por la estrechez de la acera : «La Xunta está obligada a recibir la obra por sentencia judicial y es, por tanto, la Administración responsable de su mantenimiento».

El cierre de la estación de tren propició una airada respuesta vecinal, dado que el cruce de vía entre andenes de la estación se utilizaba históricamente para pasar de un lado a otro de este pueblo atravesado por la vía del tren. El organismo apela al riesgo que entraña este uso en un punto «donde los trenes pueden circular hasta 145 kilómetros por hora»: «Además existe un riesgo potencial con la circulación de coches por la calle Antón de Pepiño, dado que a la altura de la estación la carretera gira casi 90 grados y en caso de un despiste en la conducción un coche podría acabar en la caja de la vía porque entre la carretera y la vía no había ninguna barrera física».

Frente común en Teixeiro contra el vallado de la estación: “Esto divide el pueblo en dos”

El Adif procedió al vallado de la estación de Teixeiro el pasado mes de junio sin informar previamente al Concello de Curtis. La obra pilló desprevenidos al Ayuntamiento y a los vecinos, que se movilizaron para exigir la reapertura o la “construcción de un paso a distinto nivel que permita el cruce de forma segura, estableciendo una comunicación que mantenga el pueblo de Teixeiro unido” . Los afectados denunciaron que con esta actuación el Adif «incomunicaba» las dos zonas del pueblo, la “antigua”, donde se ubican la iglesia, el cementerio y el edificio de servicios múltiples y la nueva, que concentra la mayor parte de los servicios, desde las oficinas municipales al colegio o el ambulatorio. Incidían además en que el cierre del paso peatonal obliga a dar un importante rodeo y a utilizar un paso inferior inaccesible para personas con problemas de movilidad.

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