El Estado da un primer paso para ceder el antiguo ambulatorio de Betanzos

Tras veinte años de infrauso y varias peticiones desatendidas, el Estado ha dado el primer paso para ceder al Concello de Betanzos el antiguo ambulatorio. En respuesta a una pregunta del BNG, la Tesorería General de la Seguridad Social explica que ha realizado «varias gestiones ante el interés por el mismo manifestado por el Ayuntamiento».

Los representantes de este organismo estatal detallan que han realizado varias visitas al edificio para analizar su estado y que han informado al Gobierno local brigantino de «los trámites que tienen que seguir para poder solicitar la adscripción/cesión del inmueble». Ahora, dicen, le toca al Concello mover ficha: «Cabe indicar que, a fecha actual, no se ha presentado ninguna documentación por parte de la referida Administración Local», concluye en su escrito de respuesta.

La respuesta es muy similar a la que ofreció en junio, cuando ya manifestó su disposición a ceder este edificio ubicado en Pintor Seijo Rubio, aunque sin concretar las condiciones. La alcaldesa, la socialista María Barral, mantuvo en 2022 una reunión con responsables de la Tesorería General de la Seguridad Social para avanzar en los trámites que permitan al Concello disponer de un inmueble «con muchas posibilidades».

En la actualidad, solo una cuarta parte del inmueble tiene uso, el resto suma veinte años de infrautilización. El Ejecutivo municipal abogó inicialmente por reconvertir el edificio en centro de día, posibilidad que la Xunta descartó apelando a informes que desaconsejaban este uso.

El Gobierno local recupera ahora esta proyecto tras denegarle la Xunta la ayuda para construir un centro de día en O Carregal. La alcaldesa espera que esta antigua aspiración cristalice ahora gracias a un cambio legislativo que ampara la cesión temporal para fines sociales de los edificios estatales sin uso.

El Estado se negó inicialmente a ceder gratuitamente este edificio a Betanzos. En una respuesta de 2014, alegó que realizaba gestiones encaminadas a su explotación, mediante arrendamiento, para la instalación de dependencias administrativas y atención al público.

La reconversión del antiguo ambulatorio fue defendida durante años por PSOE, BNG y otras formaciones de la izquierda en Betanzos. El PP, en cambio, ha expresado sus dudas sobre la viabilidad de las instalaciones para acoger un centro de mayores.