Toda una vida al servicio de los demás en Coirós

Antonio Gómez-Iglesias Casal llegó al Ayuntamiento de Coirós en 1987, y hasta el año pasado su rutina diaria pasaba por coger el coche desde su casa en Betanzos hasta Coirós para llevar a cabo lo que para él era «el mejor trabajo que existe: servir a los demás». A sus 69 años, el veterano secretario del Concello de Coirós cerró su última acta el 2 de julio de 2024. Es por eso que sus antiguos compañeros y vecinos han querido rendir homenajea su carrera en el municipio con una jornada especial que consistirá en una comida el 15 de marzo en el pazo de Santa Cruz de Mondoi.

El homenajeado se siente «muy feliz» por este gesto, y es que él se considera un coirense más. «Me pasé casi 40 años trabajando aquí, y nunca tuve un desencuentro con nadie, porque cuando eres secretario tienes que dejar de lado las ideologías y pensar en agilizar trámites y buscar soluciones para los vecinos», asegura el betanceiro, que trabajó de la mano de Agustín Tomé Roca hasta 1991, cuando ganó las elecciones Francisco Quintela Requeijo, el actual mandatario, con el que pasó la mayor parte del tiempo.

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«Pudimos discutir sobre ciertos ideales o cuestiones municipales, pero siempre trabajamos en buena sintonía», cuenta el exsecretario municipal, que dice que lo de ser funcionario en un ayuntamiento, aunque algunos no lo crean, es «cuestión de vocación». Al menos asegura que en su caso siempre fue así, por eso recomienda a las futuras generaciones que se planteen cuáles son las verdaderas funciones de un secretario. «Una de las cosas de las que me siento más orgulloso es de que hayamos logrado proteger el 82% del territorio con el plan urbanístico», comenta.

Dice sentirse «muy afortunado» de haber conseguido su plaza en Coirós, y es que, aunque su experiencia también fue buena en Monfero, Vilasantar y Betanzos, donde empezó su carrera como secretario, afirma que en Coirós se hizo un «hueco especial». El betanceiro asegura que en un concello pequeño, como Coirós, que tiene algo menos de 2.000 habitantes, el trabajo se hace «más familiar y próximo». Él mismo afirma que conoce «a todo el mundo» y que, aunque el año pasado se despidió de sus compañeros, todavía acude con frecuencia al lugar a hacer alguna visita.

«Estoy muy agradecido a mis compañeros y a los vecinos que han querido reconocer mi trabajo y que han estado ahí siempre», sostiene Gómez-Iglesias. Ahora, los interesados en acudir a su comida deberán confirmar su asistencia ingresando 50 euros en la cuenta de Abanca de la oficina de Betanzos CCC: 2080-3101-06-3040081421, bajo el concepto de «homenaje secretario».